Permitir la replantación de choperas en la ribera de los ríos. Ese es el pilar sobre el que pivota el nuevo plan hidrográfico del Duero para el período 2022-2027, que tumba la actual normativa de 2016 y que brinda una nueva esperanza a un sector clave en la región como es el maderero y para los ayuntamientos regados por el Carrión al ser la venta de este recurso una de sus principales fuentes de ingresos.
Para ello, se tienen que cumplir unos criterios de distancias mínimas a los cauces de aguas bajas, dejando libre el corredor ecológico principal del río y haciendo compatible el uso del suelo de Dominio Público Hidráulico (DPH) con el desarrollo de la economía rural, según detalló ayer durante una visita a Dueñas la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, Cristina Danés.
Según se recoge en el borrador del nuevo plan, en el cauce del río Carrión se libera la plantación de chopos en más de 1.200 hectáreas, que se han ganado haciendo uso de las nuevas tecnologías, pues el GPSha sustituido al «ojímetro» con el que se venía trabajando hasta ahora.
Otro aspecto importante a tener en cuenta es la unificación de criterios, «diálogo» y una «mayor coordinación» entre la CHD y los organismos de cuenca vecinos: Ebro y Miño-Sil. «Estos principios se incorporarán al nuevo documento para homogeneizar el tratamiento de plantaciones y cultivos, en consonancia con las garantías ambientales», detalló Danés, quien precisó que aún no hay fecha para su aprobación, pues esta depende del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
«La CHD es consciente y sensible a la importancia que la populicultura», concretó. Por eso, fuera del DPH ha venido autorizando plantaciones en los 100 metros correspondientes a la zona de policía. «Hacemos compabible la plantación con la preservación del ecosistema fluvial», detalló Danés.
RECURSOS LOCALES
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, también desplazada hasta la ciudad eldanense, destacó la «importancia» del sector maderero en el Duero y el papel que juegan las empresas locales en la lucha contra la despoblación.
«Nos encontramos con un plan que no permitía nuevas plantaciones y se ha dado una solución», subrayó. Una medida que tiene muy presente el cambio climático y que repercutirá de forma «muy positiva» en las arcas de los municipios ribereños que fían parte de su presupuesto a las choperas. A todos ellos les pidió «tranquilidad» y «confianza; al tiempo que lamentó las «interpretaciones interesadas de la realidad» que se han sucedido en las últimas semanas.