El Destino Palencia afronta este domingo al mediodía (12,30 h, Son Moix) su último desplazamiento de la temporada, a tierras baleares, en su penúltimo choque del curso, donde visitará al Palmer Alma Mediterránea Palma, un rival que tiene mucho en juego, pues aspira a asegurarse su presencia en los cruces del play-off.

No tiene nada en juego el equipo palentino, salvo el orgullo de ganar este y el último encuentro (la semana que viene en el pabellón ante el Alicante) y la posibilidad de mejorar una posición (siempre y cuando en las dos últimas jornadas gane un partido más que el Almansa) y acabar en la novena plaza.

El Palma se encuentra situado en la séptima posición, la última que concede la clasificación para la última fase de la competición. Necesita sumar la victoria para mantener su ventaja sobre el Valladolid, su principal perseguidor y también para tratar de arrebatarle la sexta plaza al Alicante.

En el duelo que enfrentó a ambos equipos en la primera vuelta, celebrado en el pabellón hace apenas un mes, el Palma se impuso en un atractivo encuentro por 73-77, apoyado en dos de sus grandes pilares, el base Pol Figueras y el alero estadounidense Ronnie Harrell.

Este último ha sido una de las grandes revelaciones del campeonato en la LEB Oro este curso, demostrando ser un jugador llamado a metas superiores. Sus 16,5 puntos de media y 5,2 rebotes seguro que han llamado la atención de los directores deportivos de la ACB. Se trata de un potente alero de 2,01 metros, capaz de anotar desde cualquier posición, de rebotear y de guiar y rematar el contraataque con velocidad endiablada. Difícil de parar.

Figueras ha adquirido una enorme confianza en su juego a base de minutos, donde ha podido ofrecer lo mejor de su repertorio.Dirige a a sus compañeros y, si es necesario, como sucedió en el duelo ante los palentinos, es capaz de anotar con fluidez en uno contra uno. El sueco Karl Olle Lundqvist es la segunda opción en la rotación, tras haber destacado ya en la categoría el pasado curso en las filas del Canoe.

Otro pilar exterior que llegó el pasado verano al Palma procedente del Canoe es el estonio Kristian Kullamae, un escolta veloz a la hora de levantarse en busca del aro, con gran capacidad anotadora.

Versátiles son Sean McDonnell y Jacobo Díaz, ala-pívots que combinan a la perfección con Harrell e incluso pueden compartir pista en un mismo quinteto. Dos buenos reboteadores, tiradores desde el perímetro, rápidos como sus compañeros en el contraataque y también buenos defensores.

Y como interiores puros, Karamo Jawara, duro en defensa y en el rebote, aportando su imponente físico bajo los aros. Justin Raffington, es un experimentado interior (solo él y Jawara -ambos nacidos en 1991- superan los 25 años) que brilló a principios de temporada en su estancia temporal en el Coruña). Y Milan Suskacevic (2,10 m) es el pívot que añade centímetros al juego balear.

Entrenado por Álex Pérez y Pau Tomás (se presentan como un tándem, guiados por la experiencia y sabiduría de Pepe Laso, el coordinador del club), el Palma ha sufrido la irregularidad de un equipo joven, dotado de talento y físico, pero que ha sido capaz de superar con su juego rápido a conjuntos más veteranos como el palentino, por ejemplo. Sin duda un duelo atractivo para disfrutar en la mañana del domingo.