Comenzaba motivado la semana este lunes teniendo el honor de impartir la penúltima clase del Curso de Sumilleres de Palencia, que se clausuró ayer, ante unos cuantos compañeros y amigos de Asupal, tratando materias como Gestión del Precio del Vino en el Restaurante o Elección del Surtido para la Carta de Vinos.
Los alumnos, camareros, sumilleres y/o propietarios de varios establecimientos de nuestra provincia, tienen toda mi admiración, al estar aprovechando este terrible parón de la actividad que les da de comer a ellos y sus familias, para mejorar sus conocimientos, su profesionalidad y sus aptitudes de cara a la reapertura. Desde aquí mi aliento para todos.
Prácticamente todos portaban una mascarilla roja con el lema #salvemoslahostelería, y algunos llegaban directos desde manifestaciones reclamando las ayudas que necesitan para subsistir.
En los últimos días se ha generado una agria polémica sobre la sumillería, moviéndose especialmente por las redes, tras un desafortunadísimo artículo de Andres J. Linn en el Diario Sur que casi daba por extinguida nuestra profesión, y una acertadísima y siempre brillante elegante y educada respuesta de Ferrán Centelles publicada a través del mismo medio.
Yo quiero avisar a los enófilos, a los disfrutones de la gastronomía, de que los sumilleres no han estado parados estos meses; probablemente estamos ante el momento en el que debido a confinamiento y cierres el colectivo se ha formado con más fuerza y entusiasmo, y os vais a encontrar con la sumillería como bloque más formada y motivada en la historia de nuestro país, con mayor profesionalización, con el mejor conocimiento de la gestión económica y optimización de recursos de su unidad de negocio dentro de sus competencias, y con la mayor capacidad de hacer disfrutar a los clientes que nunca hayamos conocido. Los sumilleres se han puesto las pilas, es el momento de que los clientes nos aprovechemos de este paso adelante que el colectivo ha dado para disfrutar más y mejor de su trabajo.
Hay mucho futuro en la sumillería; nunca hemos tenido tanta cantidad de sumilleres tan bien formados, y ustedes lo van a comprobar enseguida, cuando vuelvan a acudir a los restaurantes en cuanto puedan reabrir.