Froilán de Lózar

La madeja

Froilán de Lózar


Castilla comunera

23/04/2021

Siempre se dijo que Castilla fue uno de los reinos medievales de la península ibérica, surgiendo como entidad política en el siglo IX y alcanzando la categoría de reino en el siglo XI. Burgos es la cuna de esa Castilla según consta en un documento de cesión de terrenos en el Monasterio de San Emeterio de Taranco de Mena.
El nombre de Castilla me produce sosiego. Porque Castilla es un referente en mi memoria, no importa la distancia ni las versiones tan contradictorias que hablan del levantamiento comunero tal día como este de 1520. Unos calificaron la revuelta como un levantamiento antiseñorial, otros como una revolución burguesa y otro grupo afirma que se trata de un movimiento antifiscal y particularista, de índole medievalizante.
Así, quienes lo estudien mañana pueden elegir la versión que más le guste, aunque, probablemente, ninguna será la verdadera. Ahora no es fácil explicar la historia porque cada uno la ve de una manera y todos se aferran a la suya como la buena, por lo que no entiendo qué historiador está en lo cierto ni hasta donde llegará esta confusión que no permite cuando menos acercarnos a conocer lo que pasó en realidad, quiénes eran los comuneros, qué fue lo que motivó el levantamiento y por qué lo celebramos cada 23 de abril como una fiesta.
Yo creo que quienes encabezaron aquella protesta, lo hicieron hartos ya de los abusos del poder, de quienes se autoproclaman reyes, de quienes lo último que defienden es al pueblo. Lo de siempre, porque ahora estamos ante una confusión tan grande, la lucha por el poder de los políticos mientras el pueblo sufre por partida doble, primero, por una pandemia que nos está llevando a la miseria y después contemplando esa desfachatez de quienes asumieron el cargo, que se plantean mociones por doquier, que gastan en elecciones lo que no tenemos, que abandonan su puesto y que no defienden al pueblo, que es lo que prometieron. Parece que nadie sabe a ciencia cierta lo que motivó la guerra de las comunidades de Castilla, pero que se cuiden porque el pueblo ya está saturado y puede leerse lo que entonces se publicaba: «Tú, tierra de Castilla, muy desgraciada y maldita eres al sufrir que un tan noble reino sea gobernado por quienes no te tienen amor».