Ignacio Fernández

Ignacio Fernández

Periodista


Entendedor

14/07/2022

Dice la postelectoral/CIS sobre Andalucía que el PP es el referente de los votantes del PSOE. En concreto, un 38% de la clase media-baja, un 24% de la clase obrera y el 30% de la clase pobre. Los socialistas quedaron terceros en la denominada clase trabajadora.
«El arte de la prudencia» de Gracián no es un libro caro ni extenso. Se lee fácil. Haría bien Mañueco en presentarse en el último Consejo de Gobierno antes de vacaciones con un ejemplar por consejero y otro para él, obsequio utilísimo plagado de sentencias palmarias. Me atrevo a sugerirles a sus excelencias una de ellas: «No puede ser entendido el que no fuere buen entendedor».
Entre unos y otros están metiendo a Castilla y León en el territorio de los hermanos Marx, a fuerza de intentar alejarla, por el contrario, de los postulados marxistas (el barbado alemán, salvo en el ámbito onírico, poco pita ya). Este último episodio del diálogo social promete ser de lo más elocuente. Para unos (los de Vox) constituye un terreno excelente para ejercer ese estilo político de mamporrazo limpio que tanto rédito creen que pueden sacarle a ciertos perfiles del electorado. Y a los sindicatos y patronos, convertidos en víctimas, les regala una salmodia utilísima para su proselitismo y con un poco de suerte, del pendulazo, consolidan la subvención «ad calendas graecas» y salvan este trance chusco sin la optimización que todos sabemos que hay que aplicar a unas subvenciones que, a mayores de su buena fe, vienen a ser entre un trágala y un placebo.
Mientras, el PP perdiendo centralidad y equilibrio, ése que en Andalucía les ha dado una victoria que por aquí hace tiempo que no se ve. Ya lo dijo el del bigotón: «Vais a dar a los nuestros». Pues eso.