Fernando Martín Aduriz

Dirección única

Fernando Martín Aduriz


Paseos y nostalgia

30/12/2022

Al contemplar el paseo del solitario, hombre o mujer, que pasa de esa guisa sus largas horas de año sabático, no sólo pienso en el escritor Robert Walser y sus famosos paseos, sino en la noción de nostalgia.
Un novedoso libro contempla la historia de las palabras, entre ellas la historia de la palabra nostalgia, un invento, esto es, un neologismo. Un joven médico llamado Johanes Hofer decidió allá por 1688, inventarse la palabra nostalgia, uniendo a la idea de regreso ('nostos')  la de dolor ('algia'). Estudió un fenómeno muy curioso, mercenarios suizos en Francia presentaban síntomas de mareos, fiebre, desmayos, dolores de estómago, y entonces dedujo que era la añoranza de las montañas suizas y sus paisajes lo que les transportaba a ese estado de tristeza con efectos sobre sus cuerpos. Los 'neurocientíficos' del momento, forofos del cerebro como causa de todos los males psicológicos, (entonces fueron médicos militares), dijeron que se debía a las células del cerebro y a los tímpanos afectados por los cencerros de los pastos suizos, desvarío a la altura del reciente sintagma herramientas de gestión emocional.
 Pero no, la tesis que se impuso y que ha llegado hasta nuestros días es que se trataba de una dolencia causada por la pena de verse ausente de la patria, de los deudos y de los amigos. De ahí que se prohibieran las canciones que rememoraban esa ausencia, decisión similar a quien elabora un duelo, o de quienes crearon las Casas regionales para reunir emigrantes. 
Pero la invención del término nostalgia fue un gran hallazgo. La encuentro en esa mirada del paseante que recorre su ciudad con los ojos del pasado, evocando tanto tiempos remotos, como parientes de ayer, o amigos perdidos junto a voces y canciones pretéritas.
El paseante que se hace acompañar de la nostalgia, del 'mal de Suiza', sabe que su dolor viene de querer regresar a la patria, a 'la verdadera patria' (Rilke), que no es otra que la infancia.