José María Ruiz Ortega

Estampas rurales

José María Ruiz Ortega


Legumbres

23/10/2021

Cuando avanza el tiempo otoñal, con la cosecha nueva de legumbres tradicionales -garbanzos, alubias, lentejas-, todo invita a cocinar un plato de cuchara para alternar con las ensaladas. El inicio de nueva sementera, en la alternativa de tres cultivos impuesta por la PAC, las leguminosas aportan unos beneficios agronómicos demostrados desde la más antigua tradición en las labores agrícolas. Y es que, tanto la producción como el consumo de las legumbres se relacionan positivamente con la utilidad no sólo agronómica y ambiental, sino también por su riqueza nutricional. Sin embargo, se ha reducido el consumo de legumbres en España, incluso por debajo de las cantidades recomendadas por la OMS. 
La alternativa de producción de leguminosa pienso o las legumbres de consumo no encuentran un mercado fácil si no se dispone de contratos específicos. La presión de la competencia exterior es muy fuerte en garbanzos, lentejas y alubias; en estos cultivos hay que destacar la calidad producida en las denominaciones de origen. Aunque en ocasiones se ven atacadas por variedades parecidas, introducidas en el mercado sin la garantía del etiquetado o se venden a granel, con el nombre de lentejas de Tierra de Campos o alubias de Saldaña. Hay que potenciar las legumbres autóctonas, porque si en cada lugar o comarca lograron aislar unas variedades ha sido por la característica del terreno, por el sustrato del suelo y la pluviometría, de ahí las propiedades organolépticas y los minerales que aporta a la legumbre.
 En este tiempo otoñal, cuando se han recolectado las legumbres, en muchas familias existía la costumbre de comprar esos sabrosos productos de nuestra tierra. Hay legumbres que continúan sembrando algunos artesanos agrarios que son únicas por su sabor y presencia. Una olla podrida, un cocido castellano o unas alubias de Saldaña, cocinadas a fuego lento, como hacían las abuelas en el hogar, nos traslada a distinguir por los sentidos todo el sabor tradicional. Esas sensaciones percibidas en su degustación particular, como textura, olor o color, son las que al final determinan la calidad y frescura del alimento seleccionado.