Carmen Casado Linarejos

Epifanías

Carmen Casado Linarejos


La corbata

25/09/2022

El presidente del Gobierno ha decidido convertir la corbata en una eficaz arma. Según él, la supresión de dicha prenda contribuye a luchar contra el cambio climático. En esa heroica batalla le siguen sus correligionarios socialistas de modo gregario. Ni uno solo se ha vuelto a presentar con corbata. Al modo de los revolucionarios franceses del siglo XVIII, los sans-culotte, en nuestra España del siglo XXI se identifica a los progresistas preocupados por el cuidado de la salud del planeta por ir descorbatados, frente al facherio irresponsable que sigue con corbata. Es una medida irrisoria que trata de encumbrar lo banal y de exteriorizar la fe ciega en el líder, nuestro pétreo presidente. La relación entre el modo de vestir y el estatus social de las personas no es relevante, pero sí que lo es la conexión entre el pensamiento político y la presencia externa, ya que en ella va implícito el mensaje que se quiere transmitir a la sociedad. Tradicionalmente el militante de izquierda se uniformaba con vaqueros y camiseta, en verano, y jersey de cuello vuelto en invierno, cabello largo y barba descuidada. Es decir, Pablo Iglesias, en contraste con el formalismo que exhibe Pedro Sánchez, cuyo agraciado físico se ve favorecido al mimetizarse con los presidentes de gobierno europeos. Todos ellos visten carísimos trajes y camisas hechos a la medida, elegantes zapatos de fina piel, corbatas de seda que aportan el toque colorista y de buen gusto. Así transmiten una muy cuidada imagen de seriedad y respetabilidad como corresponde a la difícil tarea que se les ha encomendado. Parece que ninguno de los presidentes de gobierno de los países de la Unión Europea ha tenido la genial idea de despojarse de la corbata para luchar contra el cambio climático, a pesar de que el señor Sánchez nos repite cada vez que aparece en los medios, que en Europa siguen las directrices marcadas por su gobierno de descorbatados para solucionar los problemas de la actual crisis y los del cambio climático. Estoy impaciente por conocer el protocolo invernal en la vestimenta socialista. Creo que recuperará la corbata y pondrá de moda la bufanda y el gorro de lana a juego para protegerse de la bajada de temperatura de la calefacción en el Congreso de los Diputados, dando ejemplo de conciencia ecológica.