Esta pasada semana se ha celebrado una nueva edición del itinerante Concurso Mundial de Bruselas, en la ciudad de Brno, República Checa. En esta ocasión no he podido asistir y deseo que las enormes medidas de seguridad hayan sido un éxito y no hayan impedido un desarrollo satisfactorio de las actividades. Tengo que reconocer y agradecer los esfuerzos de todas las personas de la organización, que llevan desde el comienzo de la pandemia contactando permanentemente con los más de 300 catadores de más de 50 países, cambiando fechas y agendas… titánico esfuerzo que ahora merece un gran descanso.
El año que viene volverá al habitual mes de mayo, y será en Ningxia, importante región vinícola del norte de China, donde si hay suerte estaremos de nuevo.
Así que uno se ha quedado con ganas de conocer algunas de las zonas vinícolas del país de la cerveza por excelencia; en el sur de Moravia se produce alrededor del 90% del vino checo, en las zonas de Slóvacko, Velké Pavlovice, Mikulov y Znojmo. Las variedades blancas más importantes son las Grüner Veltliner, Müller-Thurgau, Riesling, Welschriesling y Sauvignon Blanc, y las tintas Santo Laurent, Blaufränkisch/Lemberger, Zweigeltrebe, Pinot Noir y Blauer Portugieser. Como verán, el checo no debe ser el idioma más fácil de aprender precisamente, lleno de palabras interminables con muy pocas vocales y muchas consonantes, dificilísimo de pronunciar para nosotros.
Hago una referencia a los mejores vinos galardonados en la edición 2020 del concurso de vinos Oenoforum, organizado por la Asociación de Productores de Vino de la República Checa, (algunos años he sido invitado a participar como catador, gracias a Martin Pucek, ojalá pueda acudir próximamente) que se celebró en el Castillo de Valtice, donde está la Sede Nacional del Vino. Los galardonados fueron Rhine Riesling 2018 de la bodega Jind?ich Kadrnka de B?ezí como mejor blanco, mejor blanco joven a Sylvan Green, selección de uvas 2019 de bodega de Bc. Pavla Tréšková, y en tintos Hron, selección de uvas 2018 de la bodega eslovaca VÍNO MRVA & STANKO, y la mejor cuvée fue para el tinto moldavo Aurore Syrah - Cabernet Sauvignon 2017 de la bodega FAUTOR. Por si en vez de un verdejito o un riberita se animan a algo distinto…