El dolor es llevadero con unas orejuelas

DP
-

Venta de Baños desfila con La Vieja, un muñeco «feo que da mucho miedo», y entierra la sardina entre degustaciones

El dolor es llevadero con unas orejuelas - Foto: Sara Muniosguren

Venta de Baños despidió el Carnaval como manda la tradición, con el entierro de la sardina, un doloroso trance que en la localidad se sobrelleva con la degustación de un dulce propio de las fechas, las orejuelas. Así, los venteños pudieron llevarse a boca unas 500, que bocado a bocado hicieron más llevadera, junto a la amena conversación, la concentración en la plaza del Ayuntamiento previa al desfile que partió con dirección al frontón municipal. 

En la entrega de las orejuelas, decir que colaboró la Asociación Cristiana de Viudas, así como en el reparto de sardinitas de picoteo con que finalizó la última jornada del Carnaval. 

El buen ambiente creado dio paso a un recorrido por las calles del  municipio, en el que la protagonista fue una vez más La Vieja, un muñeco «feo que da mucho miedo», en palabras del concejal de Cultura y Festejos del Ayuntamiento, Alfredo Tamayo.

La Vieja, figura representativa de la fiesta carnavalera de Venta de Baños, desfiló por delante de la comitiva fúnebre de la sardina, acompañada de la  agradable música de los dulzaineros formados en la Escuela Municipal de Dulzaina del municipio ferroviario. 

Luego -con todas las personas de luto y las habituales plañideras que invitaron al lloro continuo porque el Carnaval tocaba a su fin  al concluir la marcha en el frontón municipal venteño, se procedió a la quema de la sardina y, a continuación, llegó una gran sardinada con mayoritaria degustación de este pescado a modo de merienda final de la jornada carnavalera. 

La Vieja es un «personaje ya típico» de Venta de Baños, según cuenta Alfredo Tamayo, que explica  sobre esta tradición que hubo un tiempo en que se quemaba el muñeco, si bien se descartó a favor de sumarse a quemar la sardina, como en otras localidades. 

El concejal de Cultura y Festejos del Ayuntamiento venteño señala respecto al balance del Carnaval de este años que ha sido «muy participativo, algo menos que otros años, pero muy bien». Destaca que la gente se ha puesto disfraces muy vistosos y asevera que «los jurados que han decidido  los premios, la verdad es que lo han tenido muy difícil porque la calidad de los disfraces ha sido  exquisita». «Los venteños -afirma-  tenían ganas de salir a la calle», y añade que se ha visto mucha animación infantil.  Los niños, la verdad es que son ellos los que prácticamente tienen que disfrutar al máximo de los carnavales, y su participación ha sido muy grande».

El programa de Carnaval de Venta de Baños comenzó el 26 de febrero, con llegada de los Lokomotores. Asimismo, se pudo disfrutar del espectáculo Don Arsénico, un concierto teatralizado. También, en pos de la conciliación de la vida laboral y familiar, de desarrolló un programa de actividades (percusión y caligrafía). Malasia Junior es el título de otros de los espectáculos programados, repleto de música y animación, con canciones, bailes y muñecos. Y no hay que olvidar el gran desfile.