La firma del protocolo de intenciones entre el Ayuntamiento de Valladolid y la Junta de Castilla y León con InoBat ha servido para escuchar a los directivos de la multinacional eslovaca hablar de las bondades de Valladolid y Castilla y León para poder acoger su nueva fábrica de baterías. Un proyecto que supondrá una inversión de 3.000 millones de euros y la creación de 2.100 puestos de trabajo en una primera fase.

La decisión final se tomará este jueves en Londres, en el Consejo de Administración de la empresa, pero parece que todas las facilidades que se les ofrecen avanzan para que Valladolid sea la elegida. Una pugna en la que también está una ciudad inglesa, de la que se desconoce su nombre.

De hecho, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, mostró su satisfacción por el resultado de las negociaciones, que apuntó comenzaron el pasado mes de mayo. "La firma de este protocolo de intención indica mucho", aseguró. Un trabajo en el que han estado implicados el Ayuntamiento, el Gobierno regional y el Ministerio de Industria. De hecho, ayer se firmó un protocolo similar en Madrid con el Gobierno central, un acto que se adelantó porque la ministra del ramo está de visita oficial en Alemania.

De el hecho, el alcalde de la capital, Óscar Puente, consideró el de hoy "un día importante" porque se da "un paso más" en un camino en el que reconoció que "todavía queda algún recorrido" pero en el que las administraciones públicas han hecho "el trabajo que les corresponde: darle a los empresarios las máximas facilidades para implantar industria en nuestro territorio". El regidor recalcó la "imprescindible" colaboración entre las administraciones, incluyendo entre estas al propio Ayuntamiento, a la Junta y al Gobierno, en un momento de "transformación" por el que el mundo cambia "a velocidad de vértigo" y que conllevan la "adaptación de fórmulas energéticas que lleven a un mundo libre de emisiones, en el que las fuentes de energía sean exclusivamente renovables".

Proyecto

La visita de los responsables de InoBat a Valladolid ha servido para conocer más de una empresa que trabaja en el campo de las energías limpias. Está empresa eslovaca de I+D y de producción de baterías pretende abastecer al mercado europeo con sus soluciones energéticas sostenibles. Pero también aspira a llegar al mercado latinoamericano, por lo que Valladolid se configura como el puente perfecto para "exportar". En este sentido, el alcalde destacó a Valladolid por su "posición de privilegio" en Europa y el mercado iberoamericano para facilitar la elección de InoBat por una ciudad que "está muy bien preparada para acoger estas instalaciones" debido a que cuenta "con una universidad y un ecosistema en torno a la industria automovilística".

La justificación de la nueva megafactoria que InoBat anuncia para el oeste de Europa es la de atender a clientes de los sectores de automóviles de pasajeros, vehículos comerciales, deportes de motor y aeroespacial. Un mercado al que no puede abastecer con su planta en Eslovaquia, ya que la demanda de vehículos eléctricos en China y otros mercados "está aumentando la de baterías muy rápido".