PASIONES: La gimnasia rítmica, disfrutar del tiempo libre en compañía de sus amigos y desconectar de la rutina diaria en Población de Campos, en pleno Camino de Santiago.

TRAYECTORIA: Alumna del colegio La Salle de la capital, se trasladó a Salamanca para estudiar Periodismo. Posteriormente reforzó su currículum con un máster en Periodismo Multimedia. Sus primeros pasos en el mundo de la comunicación los dio enDiario Palentino, aunque lleva ya dos años vinculada a CyLTV.

Los diez lugares de Marta Caña:

1. El atrio de la iglesia de Santa María Magdalena de Población de Campos.  «Población deCampos es mi pueblo.Quienes me conocen saben que soy fiel embajadora de la localidad y que lo sitúo en el mapa siempre que tengo ocasión. Es el mejor sitio del mundo para un atardecer. Este punto es el mejor sitio para ver el atardecer; desde la altura del atrio de la iglesia de Santa María Magdalena se ve el campo, con el sonido del viento acariciando los cultivos. Es mi sitio favorito y se lo recomiendo a todo el mundo».

2. Colegio La Salle. «Estudié allí desde que tenía tres años hasta que cumplí 18. Probablemente, he pasado en este centro más horas que en mi casa. Gran parte de las que a día de hoy siguen siendo mis amigas compartieron esa experiencia conmigo. Además, actualmente sigo teniendo relación con casi todos los profesores.Siempre que vuelvo es como regresar a casa.

3. Calle de Gaspar Arroyo.  «Mis abuelos vivían allí y yo prácticamente también. Era una calle con mucha vida. Todos los vecinos llegaron casi a la vez y se conocían entre ellos. Tras la explosión del 1 de mayo de 2007, esa vida se esfumó. Unos días después, recuerdo ir a recoger algunas cosas de esa casa y no se me olvida la imagen de las cornisas descolgadas, el ascensor empotrado o los cristales clavados por las paredes. Lo que tampoco se me olvida es el olor a escombros que había. 

4. Plaza de San Pablo.  «Es el centro neurálgico de la Semana Santa palentina. Yo soy cofrade de la Vera Cruz y de Nuestro Padre Jesús Nazareno y este es el mejor sitio para encontrarte con otros cofrades y tomar un buen vermú. El bar Rantanplán es casi una sede más y donde siempre nos tratan fenomenal.

5. Edificio Promecal de Palencia. «Hice mis primeras prácticas enDP con más miedo que vergüenza porque la segunda no la he llevado mucho puesta. Un año después subí un par de plantas, a La 8 Palencia, donde empecé en el mundo laboral hasta hoy, que me despido de este edificio para empezar una nueva etapa en La 7. Han sido cuatro años maravillosos en esta casa».

6. Capilla de la Vera Cruz de la iglesia de San Pablo.  «Es donde está la virgen de la Vera Cruz, mi virgen. Es un lugar al que me gusta acudir sola y en silencio. Cuando algo va mal es cuando más suelo ir a buscar soluciones.Tener una conversación con ella me da mucha paz y mucha tranquilidad y me ayuda a relajarme. Es de los pocos sitios a los que siempre voy en solitario».

7. Antiguo edificio de El Diario Palentino - El Día de Palencia (calle Mayor, 67).  «Pese a ser muy pequeña, recuerdo aquel lugar: el pasillo del escaparate con todos los libros y la zona de la imprenta. Iba con mi abuelo, una persona muy aficionada a la lectura a quien le encantaba ir allí a comprar y a saludar a sus amigos del periódico. Conocía a todo el mundo y me acuerdo de salir de allí cargados de libros».

8. Campo de la Juventud.  «Hice gimnasia rítmica y pasé muchas horas de mi vida entre esas cuatro paredes. Allí aprendí lo sacrificado que es este deporte y lo complicado que es. También lloré mucho, pero eran lágrimas bonitas y conocí a gente de la que aprendí valores no solo deportivos. Cuando he tenido la oportunidad de volver, siempre he pasado por el pabellón de rítmica».

9. Monte el Viejo.  «Es un tópico, lo sé, pero soy la típica amiga del grupo que es una pesada con ir a tomar algo mientras cae el sol. Me gustan mucho los atardeceres y más si es con amigas, una cervecita y el monte. Con el buen tiempo mi grupo de WhatsApp de amigas se llama Marta, no vamos a ir al monte. No seas pesada».

10. Suministros Caña.   «Es el negocio de mis padres.Recuerdo la tienda vieja, que estaba situada en la avenida de Casado del Alisal. Ahora, la nueva, en la que llevan ya casi 20 años, está ubicada en la avenida de Castilla. En ellas, he podido ver lo dificil que es trabajar de cara al público, lo que es ser autónomo y lo que cuesta ganar el pan. Sobre todo en la época fuerte, en primavera, pasan muchas horas allí, más de las que le desearía a cualquier trabajador».