Un vecino de la calle Mayor Antigua, concretamente del tramo comprendido entre Los Pastores y el Palacio Episcopal, lleva meses luchando contra el Ayuntamiento para poder volver a estacionar su vehículo en su garaje. El motivo: la reconfiguración de la calle tras las obras de reurbanización habilitan una plaza de aparcamiento que imposibilita realizar las maniobras necesarias para acceder a su garaje. 

Este vecino recuerda que ya durante el desarrollo de las obras «uno de los alcorques proyectados se encontraba en un emplazamiento que, a buen seguro, habría de dificultar el acceso de los vehículos a los garajes del edificio número 11 de dicha calle». 

Así se lo hizo saber al Ayuntamiento y, más tarde, ante la callada por respuesta, también al Procurador del Común. «En julio, el Consistorio emitió un informe en el que se limitó a afirmar que no existía problema alguno para el acceso a los garajes», señala este palentino. Ese mismo mes, atendiendo a la queja de otro vecino del inmueble, una patrulla de la Policía Local de Medio Ambiente concluye que la queja tiene fundamento.

Es la Policía Local la que emite un informe para la Comisión de Tráfico del Ayuntamiento en el que sugieren que se elimine el aparcamiento en superficie que existe frente al número 11, con el fin de permitir las maniobras necesarias para que puedan entrar los coches en el garaje comunitario. Mientras, el Procurador del Común pide al Ayuntamiento que revise la obra de semipeatonalización realizada en la calle Mayor Antigua.

Tras los sanantolines, el Consistorio acuerda eliminar la plaza y rotular el espacio para prohibir el estacionamiento. «A día de hoy, la resolución adoptada sigue sin aplicarse. ¿Por qué este empecinamiento del Ayuntamiento en mantener una situación claramente injusta? ¿Estamos ante una vulgar cacicada? ¿O es más grave y me veré forzado a presentar una denuncia ante el juzgado por un presunto delito de prevaricación?», se pregunta este vecino, que sigue sin poder meter su vehículo en su garaje.