Gracias al Ayuntamiento de Palencia y al Patronato Municipal de los Deportes, desde que en 1997 comenzase el torneo, por aquel entonces Cobarsa, el pabellón de la capital ha sido escenario de los encuentros. De hecho, las tres primeras ediciones se jugaron de forma exclusiva en ese escenario. La Balastera se incorporó a las semifinales y finales.
La organización del ahora Trofeo Plaspisa Diputación siempre se ha amoldado a las disponibilidad de esta instalación y a las diversas peticiones del PMD: jugar los martes, luego los jueves, un partido, posteriormente dos partidos por semana, llegando a tres. Jugar en ventanas en días consecutivos con tres o cuatro partidos por día.
Las nuevas canastas de baloncesto requieren (por su peso y colocación) un esfuerzo en su montaje y desmontaje (como debe suceder en otras instalaciones de otras provincias con idéntico material). Se entiende y agradecidos estamos por el esfuerzo. Hay que amoldarse a ello, pero sin olvidar que es un polideportivo para la práctica de diversas actividades deportivas e incluso no deportivas. Por este año, se acabó el periplo en esta instalación que tanto público congrega a los partidos, pese a disputarse en horario laboral. Volverá en 2023.
Festival de goles en el hasta luego - Foto: Juan MelladoEn cuanto al partido del hasta luego, Maristas B y Pan y Guindas B ofrecieron un bonito y entretenido encuentro. Los colegiales demostraron su candidatura al título chiguito, mientras que su rival nunca se vino abajo, pese a los goles encajados, e incluso fue a más, demostrando que hay una buena generación que pide paso.
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El torneo se traslada de nuevo al pabellón Adolfo Nicolás de Villamuriel.