Un asombroso triple en carrera y en escorzo de Alec Wintering en el último segundo permitió a Zunder Palencia ganar al colista con muchos apuros, 84-87 en un encuentro que pareció perdido y pareció remontado más de una vez en cada sentido, un choque tan apasionante como extraño en su desarrollo pero feliz en su desenlace.
Arrancaba el encuentro con un Zunder Palencia muy frío, sorprendido por Hoover y sus cinco puntos de salida para los vascos, si bien el corpulento McGrew contestaba con otros cinco para el empate. Pero los vascos estaban desatados de la mano de Ansorregi, y a cuatro minutos y medio del final Rivero se veía obligado a pedir un tiempo muerto cuando Azpeitia se iba con un 12-7.
Los sistemas ofensivos de los palentinos estaban del todo oxidados, con pérdidas constantes, pasos, malas decisiones y un erial a la hora de buscar la anotación. El triple de Buckingham y la suspenbsión de Hevia a cinco metros ponían diez puntos de margen para Juaristi (17-7) cuando se entraba en los dos últimos minutos, rompiendo al fin la dinámica Kamba con un oportuno acierto de tres puntos. Movía el técnico local su banco metiendo juventud y piernas, y el triplazo de Guridi a 32 segundos devolvía los diez de renta a los guipuzcoanos.
Kamba recortaba pero Azpitarte ponía una máxima de once gracias a un triple a tres segundos de la bocina, un 23-12 al final del primer cuarto que pocos podían prever.
Gran salida de los palentinos en el segundo acto, con un triple de McGrew y un palmeo después de Rozitis que ubicaba el 0-7 de parcial, tiempo muerto de Mikel Odriozola a 7:24 con un 23-19. Rozitis acercaba a los castellanos a dos puntitos tras un jugadón remontando línea de fondo, pero un 2+1 de Aizpitarte oxigenaba a los locales. Zunder Palencia iba creciendo y Rozitis empataba a 26 a algo más de cinco minutos para la bocina del intermedio desde el 4,60.
La defensa ya funcionaba y en el ataque se habían aclarado los horizontes. Kostadinov ponía arriba a Palencia finalmente y un canastón de Germán Martínez obligaba a otro tiempo muerto local. La lógica se iba imponiendo en Azpeitia y las instrucciones del míster de los vascos de poco servían, triplazos de Kamba y Germán y el parcial que ya era de 3-24, diez arriba Zunder con un 26-36 a dos minutos y medio.
Kostadinov sumaba cinco puntos seguidos y el parcial era escalofriante, quince arriba y 3-29 en el cuarto, 0-20 en ese instante. El líder ya era el líder. Sy rompía al final la dinámica con una canasta de tres y al descanso se llegaba con un 30-41.
Pero el encuentro estaba dispuesto a seguir sorprendiendo a propios y extraños, y tras el descanso Juaristi volvía a salir arrollador, parcial de 7-0 en poco más de un minuto con una bella acción a aro pasado de Ansorregi, un triple de Hoover y un canastón de Sy para el tiempo muerto de Pedro Rivero.
El tanteador caminaba ahora por distancias muy cortas (45-46 en el ecuador). Germán y Sy mantenían un hermoso duelo anotador.
A 3:18, McGrew enchufaba dos tiros libres para mantener a los palentinos arriba en el marcador, metido el partido en una dinámica tan intensa como equilibrada y con poca anotación. Ahí se escapó de nuevo Zunder con un triple de Schmidt para dar ocho de renta al equipo en un 49-57. Guridi y Hevia recortaban las distancias desde el tiro libre después de que Palencia hubiera alcanzado de nuevo los diez de margen, y a cuarenta segundos el luminoso reflejaba un 55-59. Final de locura anotadora por ambos bandos y 58-63 final.
Inicio luchado en el cuarto parcial, donde Juaristi ya no pensaba ni en la diferencia en la tabla ni de potencial, mucha fe en los guipuzcoanos. Wintering dirigía a los palentinos pero el joven Aizpitarte ponía a los azpeitiarras a dos y Magassa se cascaba un triple estratosférico que volvía a poner a los locales arriba, 65-64 y tiempo urgentísimo de Pedro Rivero a siete y medio del final. Wintering igualaba a 68 y el partido se iba a comprimir en seis minutos, los que restaban con empate en el marcador. Guridi rompía las hostilidades con un 2+1 y con una bandeja en velocidad, cinco puntos seguidos en su haber.
Una técnica a McGrew con 73-69 venía a complicar más el panorama, y una jugada donde la defensa de Zunder naufragaba, a la tercera el triple local entraba, Hoover poniendo el 79-70. Contestaba Wintering por la vía rápida, y un triple de Kamba metía en la pomada a Palencia, 80-76 a dos y medio del bocinazo. Un 2+1 de McGrew eliminaba a Guridi y un triplazo de Magassa a 1:19 al final no subía al marcador con momentos de tensión con los banquillos y el juego parado.
A 29 segundos, Schmidt empataba a 84 desde el tiro libre, y tras el fallo de los vascos en el último tiro, Wintering se marcó un triple en carrera en el último segundo que desató la locura palentina. Qué partido tan raro, qué victoria.