No fue el mejor estreno de año para el Colina Clinic Rugby Club.

El equipo de Javi Garrido recibía al Getxo en La Balastera con la intención de medir su nivel, más que cualquier otra cosa. 

El equipo de Vizcaya era tercero en la tabla y plantearse una victoria estaba prácticamente fuera de la ecuación.

El resultado final arroja una realidad: al Colina Clinic aún le falta mucha experiencia y cuajo competitivo en esta División de Honor B.

Primeros Minutos. Desde el momento en el que ambos cuadros saltaron al campo se pudo discernir en las figuras de los vizcaínos una superioridad física que en pocos minutos iban a hacer palpable sobre el césped de la Nueva Balastera.

Los primeros compases de juego fueron algo encorsetados, con el Colina Clinic defendiendo como bien podía los ataques vascos, pero sin una alternativa clara a la hora de acercarse a la línea de gol visitante.

El choque estaba anclado en los 22 metros palentinos y tras varias melés, llegaba el primer ensayo del Getxo. No acertaba el encargado del golpe de conversión y el marcador reflejaba un 0-5.

Antes del cuarto de hora, llegaba el segundo ensayo visitante en una carrera memorable de su wing derecho, Ander Moso, que arrancó desde mitad de cancha eludiendo a todo morado que se encontraba en su camino. Además, esta vez sí, el dorsal 10 transformaba para el 0-12.

Fue entonces cuando el Colina Clinic se vino abajo, viéndose incapaz de parar a los ágiles corredores del cuadro de la ría de Bilbao, que para colmo, recibían en muchas ocasiones en situaciones muy ventajosas. 

Se sucedieron los ensayos de los vizcaínos, con un conjunto local impotente e inferior en todas las facetas de juego.

El encuentro parecía visto para sentenciando cuando, contando el minuto 40, el electrónico reflejaba un 40-0, y solo quedaba la incógnita de si el Colina Clinic podría añadir una nota de orgullo.

Cosa que, como siempre, acabó haciendo. Fue el fiyiano Lolo quién rompió la dinámica negativa con una excelente carrera para firmar el primer ensayo de los palentinos.

Juan Graciarena transformaba, y estos puntos dieron alas a un Colina Clinic, con las piernas llegando donde antes no. Sin embargo, este buen momento se vio cortado por el descanso.

SEGUNDA PARTE. Después del intermedio, el cuadro palentino salió envalentonado, pero poco a poco el Getxo volvió a imponer su jerarquía y a lograr ensayos con mucha facilidad, con ese extra del Colina Clinic logrado a raíz de sus primeros puntos, diluido. El choque volvía a la tónica inicial.

Sumó nuevos puntos para el cuadro local Cristian, y posteriormente convertía el ensayo Juan Graciarena. 

Terceño firmaba el 19-78 , aunque esta vez el primer centro argentino no acertaba con su puntapié.

Después de ello, añadían otros dos ensayos los guechotarras y transformaban uno de ellos.

Un duro golpe para el Colina Clinic, que denota la exigencia que supone esta División de Honor B para los recién llegados. 

Aún así, la experiencia adquirida en este tipo de derrotas será válida para firmar una segunda vuelta más compacta, ya sin los equipos punteros como Getxo, que juegan en otra liga diferente a los de Javi Garrido.