Sonia Lalanda trasladó el viernes a los afiliados de Vox su dimisión como presidenta de la gestora del partido en Palencia, una decisión que hizo pública en la reunión anual de afiliados que tuvo lugar en el hotel Don Sancho, la cual contó con la presencia del diputado nacional por Valencia y director institucional de Vox España, Julio Utrilla. 

De momento, los únicos que conocen las razones de Lalanda para dejar la dirección provincial del partido son los afiliados, ya que será mañana lunes cuando dé explicaciones de su decisión ante los medios de comunicación.

La abogada y secretaria municipal tomó las riendas de Vox en Palencia en marzo de 2019. En un principio, se trataba de una situación coyuntural, a consecuencia de la decisión de la dirección de Madrid de prescindir de quien estaba al frente de la formación política de Santiago Abascal, José María Arconada.

Sin embargo, pasaron las elecciones municipales y la interinidad de Sonia Lalanda se mantuvo hasta el punto de que ha durado más de tres años. Este puede ser uno de los motivos de su dimisión, que se produce a menos de un año de la cita electoral de 2023.

Fuentes conocedoras del partido han explicado a este periódico que ella y la formación «han pensado que era el momento de un relevo», aunque no era ningún secreto que Lalanda no estaba contenta con esa situación de interinidad, sobre todo en un momento clave de cara al próximo año, ya que  Vox necesita asentar la implantación del partido a nivel provincial si quiere mejorar sus resultados electorales de 2019.

La decisión de Sonia Lalanda se restringe exclusivamente a la dirección del partido porque sí seguirá como concejala del Ayuntamiento de la capital hasta que finalice el mandato en junio del año que viene. 

Menos claro está si encabezará la candidatura de Vox en la capital el próximo año, una decisión que la formación deberá tomar en los próximos meses, sobre todo si se plantea un cambio al frente de la lista.