Ya no hay barrera para poder saber al instante y desde casa si tenemos la Covid-19, es decir, si nos hemos contagiado del temido coronavirus. Tan solo es necesario acudir a la farmacia más cercana y comprar un test de autodiagnóstico.  

Este acto tan sencillo que permite salir de dudas ante el mínimo síntoma y hacer un ejercicio de prevención era inviable hasta la semana pasada. Para saber si estabas o no contagiado la única alternativa era, si tenías síntomas o sospechas, acudir a tu centro de salud y que te realizaran un test de antígenos o una PCR. También cabía la opción de recurrir a una clínica privada y pagar la prueba correspondiente, o solicitar a un profesional sanitario que te cursara receta médica para adquirir el kit de autodiagnóstico en la farmacia, una alternativa que apenas ha sido empleada. 

Pero, desde la semana pasada, las 97 farmacias de la provincia pueden dispensar ya los test de autodiagnóstico rápido para la detección del SARS-CoV-2 sin necesidad de receta y sin necesidad de mediación médica. A un precio de entre siete y once euros el test individual y unos 40 euros la caja en la que vienen cinco test, la población general tiene ya acceso a la realización de las pruebas a título individual, lo que puede suponer reducir en cierta medida la presión asistencial en los centros sanitarios pero, también, la identificación rápida de sospechas de casos positivos. 

El interés ha sido elevado. «Desde que comenzó la venta sin receta médica de estos test la demanda ha sido alta, sobre todo de cara al fin de semana», especifica el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Palencia, José Luis Nájera, quien no obstante, recuerda que el resultado de estas pruebas indica «solo una sospecha». «La confirmación del positivo tiene que efectuarse por el centro de salud», añade.

En este sentido, Nájera asegura que desde las oficinas de farmacia se está haciendo una «dispensación activa», es decir, ofrecer al paciente toda la información necesaria para que pueda realizar la prueba con todas las garantías, tanto el cómo como el cuándo. «Es importante saber que no hay que realizarse la prueba en el minuto 1 después de sospechar que se ha estado en contacto con un positivo. Lo adecuado es esperar entre 48 y 72 horas y realizarla siempre en los 7 primeros días. En caso de duda, hasta entonces lo mejor es aislarse», detalla José Luis Nájera.

El resultado de la prueba se obtiene en apenas 15 minutos y, en caso de arrojar resultado positivo, cabe recordar que el SARS-CoV-2 es de declaración obligatoria, es decir, la persona afectada está obligada a poner el resultado en conocimiento del centro de salud para que le practiquen una PCR de confirmación. 

«La aplicación Sacyl Conecta incluye un apartado en el que se puede notificar el positivo y, automáticamente, cita al paciente con su médico para una prueba de confirmación», asevera el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Palencia, quien confía no obstante en que la población sea responsable «porque si no es con la colaboración de todos no podremos parar el virus». 

otras pruebas. El elevado interés por este tipo de test ha hecho que disminuya la demanda de las otras pruebas que ofrecían las farmacias, los test de anticuerpos. Estos son los del pinchazo en el dedo y permiten saber si se ha tenido o no contacto con el virus [permite la detección cualitativa de anticuerpos IgM/IgG Covid-19 por separado, es decir, si has pasado el coronavirus -aunque haya sido de forma asintomática- o si, una vez vacunado, has generado anticuerpos frente al Covid-19]. 

No obstante, según explica Nájera también están despertando el interés de aquellas personas que se han vacunado y quieren saber si han generado inmunidad a través de la medición de IgG. «Hay que hacerse la prueba entre 15 y 21 días después», señala el farmacéutico.

Colaboración. Cabe recordar que el Consejo de Ministros aprobó el martes pasado el Real Decreto que da vía libre a la venta de estos test en farmacias sin prescripción médica (modifica el Real Decreto 1662/2000, de 29 de septiembre, sobre productos sanitarios para diagnóstico in vitro, con objeto de regular la venta al público y la publicidad de los productos de autodiagnóstico de la Covid-19). 

El trámite supone incorporar a la red de farmacias de una manera más activa en la lucha contra la pandemia. «Desde el principio de la pandemia nos hemos puesto a disposición de la autoridad sanitaria para ayudar tanto en aliviar la carga de la Atención Primaria como en la resolución de dudas y en la prestación de información a la ciudadanía para conseguir un uso responsable de los recursos», sostiene José Luis Nájera.

«Por dispersión, cercanía y confianza con el cliente, las 97 farmacias de la provincia están en una situación privilegiada para contribuir en la lucha contra la pandemia», finaliza.