El Palencia Cristo Atlético disputaba al mediodía de ayer en el campo del Plantío de Zaratán el primer encuentro amistoso de su pretemporada, donde se enfrentaba a un rival de superior categoría, el joven Real Valladolid Promesas de los palentinos Apa y Castri, que se adjudicó la victoria no sin apuros.
No había podido estrenarse dos semanas antes el equipo de Rubén Gala, con escasos días de trabajo a sus espaldas, ante el primer equipo del Valladolid, debido a un brote de covid de última hora. Ysi aquel compromiso hubiera llegado demasiado pronto (aunque ilusionaba la categoría del rival que hubiera visitado La Balastera), el de ayer ya se jugaba con un equipo palentino más rodado, al final de su tercera semana de labor.
Yde esa manera, con las bajas de Javi Bueno y Adri, junto a algunos componentes del filial (que se pondrá manos a la obra el lunes en El Otero y que contará con la novedad de Roberto Ortega como entrenador de porteros) y futbolistas a prueba como el japonés Yuya y Fran, los de Rubén Gala plantaban cara desde el inicio.
Derrota mínima en el primer choque estivalAdrián Gómez abría el marcador para los blanquivioletas aprovechando un despeje corto de la defensa palentina tras una falta lateral. Apenas se habían jugado cinco minutos, en los que el Palencia Cristo también había tenido su ocasión, en un mano a mano de Alfredo que se estrelló en el palo.
Cerca de la media hora Manu igualaba el marcador después de que Edu Gallardo hubiera disparado al poste. Y, aún antes del descanso, el Valladolid Promesas se volvía a adelantar, por medio del delantero Slavy, tras un rápido saque de banda de su equipo.
En la segunda mitad, muchos cambios y alguna buena opción de empatar para los palentinos, como el mano a mano que el portero salvó ante Álvaro. Mejor en la primera mitad, pero el equipo de Rubén Gala ofreció un más que digno nivel en su primer amistoso.
En los vallisoletanos jugaban los dos palentinos: el extremo Castri salió como titular y el lateral Apa entraba en la segunda mitad.
ZUBI SE MARCHA. Cuatro temporadas ha vivido el cacereño Andrés González, Zubi, en tierras palentinas, vistiendo la camiseta morada.
Llegaba en el verano de 2017, procedente del Unionistas de Salamanca. Tras sus dos espectaculares primeras campañas (con 10 y 11 goles, respectivamente), los problemas físicos (una pericarditis recurrente) le han impedido aportar todo su talento al equipo palentino. Apenas cinco partidos en la inacabada campaña 2019-20 y mayor aportación en la del ascenso, aunque sin poder llegar a ser el fenomenal jugador que demostró a su llegada. Dos goles llevaron su firma en la temporada despedida del club, donde fue artífice del ascenso.