Desde hace algunos años, visitar Estepona, en Málaga, es visitar la capital del arte urbano. La iniciativa Ruta de los Murales surgió en 2012. Ocho años después son medio centenar las obras que decoran las fachadas de la localidad andaluza. A ellas se sumarán en breve otras diez, una con sello palentino. Y es que la propuesta presentada por El Chorro Arts ha sido una de las seleccionadas para participar en el II Concurso Internacional de Murales de Estepona.

«Para nosotros es todo un honor que nuestro proyecto haya sido elegido entre más de cien ideas», apunta Alba Martín, la artista que, junto a Javier Revilla, gestiona el estudio de tatuajes ubicado en la calle Alfonso VIII de la capital palentina, un espacio desde el que ambos impulsan también el arte mural. En esta ocasión será él quien se traslade hasta Estepona para decorar la medianera de un edificio de cinco plantas. «La obra -una reinterpretación de una fotografía en la que aparece una chica palentina disfrutando de ese corto momento del amanecer, cuando aún refresca y salen los primeros rayos que calientan la mañana- tendrá unas medidas de quince metros de alto por seis o siete de ancho», continúa la joven.

De esta forma, El Chorro Arts sumará su nombre a los del resto de artistas murales que han contribuido a convertir el municipio malagueño en una auténtica galería al aire libre que atrae cada año a cientos de turistas. «Javier tendrá desde mañana hasta el día 11 para elaborar el mural», continúa Martín al tiempo que explica que, de los diez diseños, dos recibirán un premio, el primero de 10.000 y el segundo de 5.000 euros.

La iniciativa tiene la misma filosofía que el Palencia Infame, un festival artístico que los chicos de El Chorro Arts pusieron en marcha en 2018 y este año celebrará su tercera edición. «Nuestra intención siempre ha sido innovar, romper y llamar la tención a través de esta propuesta», apuntan desde el estudio palentino, que este año tiene la intención de seguir poniendo su granito de arena «para que Palencia deje de ser infame». Por eso, en esta ocasión el grueso de las intervenciones artísticas se desarrollará en El Sotillo y, más concretamente, en el muro junto al río. «También estamos conversando con los vecinos de San Juanillo y San Telmo para mejorar esos barrios», explica Alba Martín. 

La fecha del próximo Palencia Infame aún está por decidir, aunque lo que sí es seguro es que será a finales de mayo o principios de junio. «También estamos en contacto con el Ayuntamiento y nuestra idea es, como otros años, completar la programación con otro tipo de actividades como las musicales», añaden los artistas. Exportar a los pueblos esta iniciativa de intervenir y dar vida a los espacios públicos es otro de los objetivos de El Chorro Arts. «Somos los primeros interesados en desestigmatizar el tema del spray y en hacer que el arte se convierta en un nuevo reclamo turístico en Palencia», concluyen.