Editorial

La inflación limita la capacidad para hacer crecer el negocio

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La combinación entre inflación (precios por las nubes) y salarios bajos se puede convertir, y no solo en España, en un cóctel preocupante

En un contexto en el que una gran parte de las empresas todavía no se ha recuperado de los estragos de la crisis sanitaria, ha llegado un nuevo desafío que amenaza su viabilidad y flujo de caja: la inflación. Según la nueva edición del Informe Europeo de Pagos, presentada esta semana a nivel internacional, el 51% de las compañías de Castilla y León reconoce que esta problemática está limitando su capacidad para hacer crecer el negocio y aprovechar nuevas oportunidades. A nivel nacional, este porcentaje sube al 55 por ciento.

 Tal y como indica este estudio, que analiza la salud financiera y las previsiones económicas de las empresas de 29 países de toda Europa -entre ellos, España-, la razón principal de esta afirmación es que un 54 por ciento no cuenta con la experiencia y capacidad necesarias para gestionar correctamente el impacto de la inflación en su empresa. En España, la cifra es del 51 por ciento, lo que sitúa a nuestro país en una posición destacada en Europa, ya que es el segundo con menos organizaciones sin experiencia y capacidad para afrontar las consecuencias empresariales de la subida de precios. En concreto, estaríamos solo por debajo de Alemania (49%) y siete puntos mejor que la media europea (58%) y de otros mercados como Italia, Francia y Reino Unido. 

Las entidades que afirman tener menor capacidad para afrontar la inflación en sus negocios son las griegas, las estonias y las suizas. Con la inflación, muchas empresas están viendo peligrar su margen de beneficios por la pérdida de clientes a causa del aumento del precio de sus propios productos, o por el incremento de sus costes empresariales. Una situación que, a su vez, repercute en dos de sus principales activos de valor: empleados y proveedores. 

En Palencia, sin ir más lejos, hemos conocido en las últimas horas el caso de una empresa familiar ubicada en la carretera de Villamuriel que ha podido salir del concurso de acreedores en el que se vio inmerso por sobre endeudamiento. Después de muchos años de sacrificio, la empresa familiar se vio abocada a una situación límite aunque finalmente ha podido ver la luz gracias a la aportación de terceros, incluida la Justicia.

Pero volviendo al problema general, la combinación entre inflación (precios por las nubes) y salarios bajos se puede convertir, y no solo en España, en un cóctel preocupante con consecuencias impredecibles, ya que si la situación no se corrige puede estallar una crisis social de enormes proporciones.

En cualquier caso, España, desde siempre, ha sufrido los rigores de los precios de la energía precisamente por la falta o escasez de recursos. No hay petróleo, ni gas en abundancia y el número de centrales nucleares está muy por debajo de las necesidades reales. Solo quedan las energías alternativas, pero necesitan un impulso más profundo para convertirse en verdaderas alternativas energéticas.