En una provincia como la palentina, con un tejido industrial limitado y un puñado de empresas relevantes, pero solo un  puñado, celebrar el trigésimo aniversario de una firma con denominación de origen cien por cien y con la innovación tecnológica y la internacionalización por banderas, es motivo de orgullo. Está de enhorabuena la mercantil, lo están sus tres socios y sus cerca de setenta trabajadores, lo están los clientes a quienes satisface con sus servicios y, por extensión, la está Palencia. La automoción, con sus auxiliares, y la agroalimentación con sus buques insignia llevan también décadas llevando a la provincia por el mundo con inequívocos e incontestables parámetros de calidad. Pero que, lejos de las concentraciones de empresas de tecnología punta, una con sello palentino haya colocado cuarenta mil puntos de información digital en más de un centenar de países de los cinco continentes, es como para quitarse el sombrero. Ni es fácil ni inmediato conseguir algo así, ni es fácil ni inmediato lograr el reconocimiento, hacerse con una importante demanda, mantenerla satisfecha, seguir mejorando la oferta y codearse con las más importantes del sector.  

 Cuando se empieza diseñando videojuegos y se acaba saltando a la cartelería digital dinámica en el 95 por ciento de las estaciones de alta velocidad y el 70 por ciento de las de ferrocarril en España, además de en los autobuses urbanos de Madrid, el metro de Medellín (Colombia), el de Santiago (Chile), el de Toluca (México) o el de Málaga y los ferrocarriles de la Generalidad valenciana, en nuestro país; sin obviar que es referente en la digitalización del mayor grupo textil del mundo, Inditex, presente en 120 naciones; cuando todo esto sucede, toca felicitar a sus artífices y desearles otros treinta años, al menos, de éxitos y de presencia internacional incuestionable. Cuando BBVA, Burger King, Brittany Ferries, Balaruia, Hyundai, Repsol o el Mall de Emiratos para sus tiendas, son clientes, lo que toca es reconocer el trabajo de emprendimiento, el proceso de crecimiento y la inversión constante en innovación de los tres palentinos que hace treinta años pusieron en marcha ICON Multimedia, sin soñar ni de lejos en llegar a abarcar tanto, en ser punteros, en estar en la cresta de la ola y, siempre, manteniendo aquí su sede y el grueso de su trabajo. 

Esta empresa cien por cien local está ahora mismo a la vanguardia de la información visual para los usuarios de terminales de viajeros, para los clientes de grandes y pequeños espacios comerciales y hoteles, y también de los sistemas y soportes publicitarios de terceros para su explotación. Pues eso, que lo que toca es congratularse de la firmeza de Juan Carlos Martín y los hermanos Rafael y Enrique Hornos y esperar para ellos el mejor de los futuros.