Uno no se hace a la idea de cuántos libros tiene hasta que los tiene que meter en cajas. El Ayuntamiento calculaba que en las bibliotecas de los centros sociales de Miguel de Unamuno y San Telmo tenía unas 36.000 obras, pero seguro que no había medido cuántas cajas y cuántos viajes iban a ser necesarios para trasladarlas a su nuevo hogar: la gran biblioteca para la zona sur de la ciudad que abrirá sus puertas a mediados de mes.

El viernes cerraron sus puertas las salas de préstamos de libros del centro de Miguel de Unamuno, que pronto será sometido a una profunda reforma, y de San Telmo, que en realidad estaba ubicada en el centro social del barrio de la Avenida de Madrid. Sin embargo, desde mediados de octubre sus trabajadores se han afanado en ordenar y empaquetar todos y cada uno de los libros de sus estanterías, así como el resto del material de préstamo: revistas y dvd's, prensa, reproducción... 

En total, 36.000 volúmenes que, pacientemente, se han ido trasladando al centro cultural Lecrác, donde están siendo desembalados y depositados en las nuevas estanterías. Todo el mobiliario de la nueva biblioteca ha supuesto un desembolso de 74.470 euros a la Concejalía de Cultura y Turismo que preside Laura Lombraña. 

Uno de los quebraderos de cabeza que han tenido los últimos equipos de Gobierno del Ayuntamiento ha sido dar contenido y sentido al Lecrác. La solución que se adoptó fue concentrar en las instalaciones de lo que fue el Museo-Archivo de la Policía Nacional  las dos bibliotecas municipales de la zona sur de la capital: en el barrio del Campo de la Juventud y en el de la Avenida de Madrid. 

Cuando en marzo terminaron por fin las obras de arreglo de la estanqueidad de la cubierta y el Lecrác estuvo listo y preparado para recibir nuevos servicios, se planificó el traslado con el objetivo de abrir las instalaciones antes de que terminase el año.

La nueva biblioteca se articula en torno al octógono central. En la planta de abajo, están las dos salas de préstamo para adultos y una infantil, con el fin de que los más pequeños de la casa tengan su propio espacio para descubrir y divertirse con la lectura. En esta zona también hay una parte para la lectura y otra para realizar consultas informáticas.

En el piso superior se han habilitado dos grandes salas para consulta, en cuyas estanterías lucen ya decenas de enciclopedias y colecciones por tomos tanto para adultos como para menores. En total, hay prácticamente un centenar de puestos, repartidos en largas mesas con ocho espacios en cada una.

Todo está ya equipado:estanterías blancas de casi dos metros de altura, mesas de lectura, sillas, cableado eléctrico para los ordenadores, mesas y sillas infantiles, percheros, papelera, taquillas, etc. Tan solo falta el arco de seguridad que evitará que se roben ejemplares y algún que otro accesorio. «Vamos a intentar que abra el día 15», aseveraba ayer Laura Lombraña, que explica que estas instalaciones se completarán con un espacio para trabajos en grupo en una sala a la entrada del Lecrác. 

Hasta que llegue el día de la inauguración, las salas de estudio del CEAS de Miguel de Unamuno y del CS de San Telmo seguirán aceptando devoluciones de libros. El Ayuntamiento aún tiene que concretar los horarios de la nueva biblioteca, pero es seguro que abrirá de lunes a viernes, en horario de mañana y tarde; y los sábados solo en horario de mañana.

salas de estudio. A estos nuevos espacios se sumarán tres que ya están funcionando desde hace meses: las salas de estudio. El Lecrác dispone de tres, por lo que ofrece una capacidad para 198 personas ahora que se han eliminado las restricciones de aforo.  Dos de estos tres espacios se articulan, precisamente, en la planta superior de la biblioteca.

Estas salas están disponibles para aquellas personas que deseen estudiar en horario de 8 a 15 y de 16 a 21,45 horas, de lunes a viernes; de 9 a 14,45 y de 17 a 21,45 horas, los sábados; y de 10 a 13,45 horas, los domingos.