Cáritas ayuda a 16.000 personas durante la crisis sanitaria

SPC
-

Martín de Lera apunta que muchos de los beneficiarios no habían acudido nunca a la organización religiosa o llevaban tiempo sin ir a los centros y parroquias

Cáritas ayuda a 16.000 personas durante la crisis sanitaria - Foto: Ical

Cáritas de Castilla y León ha ayudado en los cuatro meses de pandemia del coronavirus, que van del 1 de marzo al 30 de junio, a cerca de 16.000 personas con algún tipo de dificultado o situación problemática en el programa de atención primaria o de base, frente a las 33.326 de todo el año pasado en la Comunidad. Es decir, en apenas cuatro meses casi se ha alcanzado la mitad del total de beneficiarios de 2019, lo que, a juicio del presidente de Cáritas Autonómica de Castilla y León, Antonio Jesús Martín de Lera, da idea de la magnitud de la crisis económica y social que se avecina a raíz del COVID-19, que se ha cebado en algunos barrios y poblaciones donde la demanda de ayuda se ha duplicado o triplicado. Además, reconoció que no solo ha aumentado el número de beneficiario si no, sobre todo, las intervenciones ya que, en la actualidad, las personas con problemas demandan ayudas de manera más continuada. 

Durante la presentación de la memoria de Cáritas en Castilla y León del año 2019, Martín de Lera reconoció que muchas de las personas que han recibido ayudas de urgencia social o de emergencia en la Comunidad, a través de la llamada atención primaria, son gente que nunca había atendido la organización vinculada a la Iglesia o que llevaban años sin acudir a los centros y parroquias. Apuntó que el perfil del beneficiario de las ayudas es una persona con una edad entre 35 y 55 años, que, en muchos casos, tenía un empleo y un sueldo que permitía vivir a su familia pero no ahorrar. "Con la pandemia, de repente, se han quedado sin trabajo y sin ingresos. Te dicen que han podido vivir 15 días pero ahora no tienen medios", precisó. En este sentido, recordó que las ayudas y las prestaciones por ERTE no han llegado a muchas personas en abril y mayo.  

Ante este panorama, el presidente autonómico de Cáritas se refirió al escenario de "incertidumbre" en el horizonte, no solo por desconocer la evolución de la pandemia y ver si hay rebrotes a partir de otoño sino también por las "malas" previsiones en el ámbito económico y social. Citó, según recogió la Agencia Ical, los más de 5.000 nuevos parados en un mes de junio que, habitualmente, el positivo para el empleo así como el cierre de empresas y de pequeños negocios.  

Martín de Lera recordó que el último informe FOESSA recogía que Castilla y León contaba el año pasado con 368.000 habitantes -15,4 por ciento de población- en situación de exclusión social. sobre todo de familias numerosas y hogares unipersonales pero también que la tasa de personas trabajadoras pobres era de un 13,4 por ciento (tres puntos más que la media nacional). Unas tasas que, auguró, podrán aumentar, ya sea por que se va a destruir empleo y, además, aumentará el trabajo precario, con contratos por horas o días.

Llamada a la responsabilidad

En todo caso, destacó que Cáritas trabaja en un escenario de "esperanza" al apuntar que "Dios no nos abandona" y que la sociedad siempre responde a la llamada de la solidaridad. De ahí que hiciera un llamamiento a la "responsabilidad" de la ciudadanía porque el problema no es de Cáritas sino de toda la sociedad pero también del tercer sector, las empresas y las instituciones. Por otro lado, valoró la "capilaridad" de su organización que, gracias a las parroquias y los sacerdotes, llega a "cualquier rincón" de Castilla y León, por pequeño que sea el pueblo.  

Reconoció que las cifras de la atención de personas durante los meses de la pandemia no pueden ser exactos al señalar que los técnicos suelen decir que la prioridad, en estos momentos, es ayudar a esos colectivo y no tanto "mecanizar" los datos, que se incrementan "exponencialmente" todos los días.  

A las 16.000 personas que han recibido ayudas de emergencias para hacer frente al pago del alquiler y los gastos de luz, calefacción, gas y luz de la vivienda pero también para la compra de alimentos y productos de higiene, se suman otras 5.000 que se han beneficiado de otros programas de Cáritas como  personas sin hogar, mayores, infancia y juventud y toxicómanos drogodependientes, entre otras.  Un total de 21.000 atendidos que entre marzo y junio han sido atendidos por Cáritas, que ha realizado 113.000 intervenciones. "Quien no tiene para comer, se le ayuda con la entrega de alimentos o con una tarjeta para que vaya al supermercado a comprar, pero a los 15 días te dicen que vuelven a tener hambres y reclaman ayudas al no tener recursos económicos", explicó.

Memoria de 2019

En cuanto a la memoria de 2019, las 11 cáritas diocesanas de la Comunidad (Astorga, Ávila, Burgos, Ciudad Rodrigo, León, Osma-Soria, Palencia, Salamanca, Segovia, Valladolid y Zamora) llegaron a 132.487 personas con sus proyectos sociales, en los que invirtió cerca de 34 millones de euros.

Antonio Jesús Martín de Lera declaró que la labor de las cáritas se fundamenta en la acogida, el encuentro y el acompañamiento orientado a la promoción, autonomía, corresponsabilidad y participación de las personas. Un acompañamiento que se desarrolla a través de los 381 equipos parroquiales, 82 interparroquiales, arciprestales y diocesanas y 92 centros sociales, sin olvidar  los 900 técnicos contratados y los cerca de 5.000 voluntarios.  

Cáritas Castilla y León invirtió 33,8 millones de euros lo que supone un descenso de tres millones con respecto al año 2018. Los ámbitos que acapararon mayores recursos fueron Mayores (10, 8 millones), Acogida y Asistencia (4,7 millones), Empleo y Economía social (4,2 millones), Personas sin hogar (3,5 millones), Personas con Adicciones (2,9 millones) e Infancia (1,3 millones de euros).