El Palencia Cristo sigue imbatido en La Balastera

David del Olmo
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El Palencia Cristo superó con claridad y acierto a un flojo Navalcarnero para sumar la segunda victoria de la temporada ante sus aficionados. Anotaron los goles Gallego, Álvaro de penalti y Abel, que regresaba

El Palencia Cristo sigue imbatido en La Balastera - Foto: Juan Mellado

El Palencia Cristo Atlético sumó la segunda victoria liguera en un duelo en el que fue muy superior al Navalcarnero y donde mantuvo la imbatibilidad de La Balastera gracias a los tantos, todos generados desde la banda izquierda, de Gallego, Álvaro de penalti y Abel en un córner.

Poco tardaba el equipo palentino en situarse por delante en el marcador. En el minuto 9 Gallego, alineado esta vez de inicio en el centro de la defensa morada, a la izquierda de Abel, que regresaba tras dos semanas de ausencia por un esguince de tobillo, era el protagonista. Desquitándose de un par de acciones desgraciadas en sus dos anteriores apariciones en La Balastera, se sumaba al ataque y enviaba un magnífico zurdazo cruzado a ras de hierba que se colaba a la izquierda del portero madrileño González, haciendo estéril su estirada.

De la gran pierna izquierda del zamorano llegaron los mejores lances del juego palentino en los primeros 45 minutos. El resto lo hizo la buena labor conjunta del equipo local en la presión, ante la que al Navalcarnero le costó un mundo salir jugando desde atrás como pretendía. Un par de faltas frontales que salvaron la barrera visitante (una se iba arriba, la otra la despejaba el portero) y un saque de esquina cuya rosca casi le causa un disgusto al guardameta, fueron el resto de aproximaciones moradas al área rival. Un reducido bagaje, pero el Palencia Cristo mandaba en el marcador, manejaba con la pelota el ritmo del choque y no sufría. Porque el Navalcarnero no probó en el primer tiempo los reflejos del portero local, que por primera vez este curso era Dani (que llegaba a un once muy distinto al de semanas anteriores, con la ausencia de Guille y también sin Morante, Silva y Erik, otros de los habituales en las primeras alineaciones de Rubén Gala). Ayer Gala rotó a su plantilla, utilizando de inicio a Iker, Sellés y el portero (Álvaro ya había sido titular en Móstoles).

Apenas en un par de jugadas rondó el peligro por el área palentina antes del intermedio, con un balón que se paseaba por el área pequeña de Dani en el ecuador de la primera mitad y una larga jugada de carambolas (remates desviados, despejes defectuosos) en el 38’, saldada sin mayores consecuencias que el desasosiego en la grada.

Iniciaba el equipo palentino el segundo tiempo con la entrada de Silva para ocupar su habitual lugar en el lateral diestro, adelantando la posición de Álvaro y dejando a Diego (que había ocupado el ala derecha del ataque palentino hasta el descanso) en el vestuario. No llegaba por esa banda el segundo tanto del duelo, de nuevo madrugador, sino en un centro desde la izquierda de Sellés (que regresó al lateral zurdo, sus dominios el curso pasado). Del Moral tocaba con la mano nada más salir la pelota de la bota del palentino y el colegiado señalaba el punto de penalti. Lo transformaba con maestría Álvaro Gómez, pegado al poste, donde no llegan los porteros.

El Navalcarnero reaccionó tímidamente, con un par de remates, pero el partido se rompía tras los movimientos en ambos banquillos, aparecieron más espacios y el equipo local sentenciaba antes de la media hora. Un córner sacado, cómo no, por Gallego, lo cabeceaba con potencia Abel para situar el 3-0 que rompía cualquier esperanza visitante a poco más de cuarto de hora del final.