Cada año se cierran en la provincia en torno a una veintena de explotaciones ganaderas de vacuno, una media de dos al mes (datos de UPA correspondientes a 2020 y 2021), por las reiteradas subidas de los costes de producción, sumado a la falta de relevo generacional en un sector que no sabe de horarios y no distingue entre días de entre semana y festivos, todos son laborables.

Unos datos que ponen de manifiesto la difícil situación que atraviesa el gremio de agricultores y ganaderos, sumidos en la más absoluta incertidumbre sobre el futuro de sus tierras y su cabaña por el aumento en costes como la electricidad, el gasóleo, los fertilizantes o el pienso. 

Así lo puso de manifiesto ayer el presidente de Asaja Palencia, Honorato Meneses, quien advirtió que los regadíos alimentados con electricidad podrían perderse «por falta de rentabilidad», que los fitosanitarios «son imprescindibles» y que pudiera darse el caso de «sacrificar animales» ante el fuerte desembolso que deben asumir los ganaderos para alimentarlos. A este último problema se suma la guerra en Ucrania, que está encareciendo materias primas y puede desembocar en una crisis de desabastecimiento. Como ejemplo, alertaron de que las existencia de maíz y cereales para alimentar al ganado  durarán «poco más de un mes».

Motivos más que suficientes, considera la organización agraria, para tomar las calles de Madrid el domingo de la semana próxima (día 20) en defensa del campo. Una movilización conjunta con UPA y COAG que llevará por lema El mundo rural despierta. 20M Rural, juntos por el campo.

Para acudir a la misma, las tres opas fletarán autobuses gratuitos -tantos como sean necesarios, según la demanda- que recorrerán la provincia en seis rutas con destino a la capital de España: Aguilar de Campoo y Herrera de Pisuerga; Cervera de Pisuarga y Osorno; Saldaña, Carrión de los Condes y Villoldo; Villaviudas y Baltanás; Dueñas y Palencia, con horarios de salida entre las 6 y las 7,30 de la mañana.

Estos desembarcarán a sus ocupantes en el entorno de la plaza de Atocha, de donde partirá una manifestación que concluirá ante el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

«Es importante que vayamos, como lo vamos a hacer, en unidad de acción las tres organizaciones agrarias. Y también que la sociedad nos acompañe», manifestó el secretario provincial de UPA, Blas Donis.  

«Es una gran oportunidad para poner de manifiesto toda la situación que está atravesando el sector, de abandono por parte del Gobierno con los costes más caros de la historia», señaló el máximo responsable de COAG en la provincia, David Tejerina. A renglón seguido, pide que se aplique con garantías la Ley de la Cadena Alimentaria, que «no está sirviendo para nada». 

Pidió también la puesta en servicio de un observatorio de costes y consumos que acabe con los «oligopolios de los fertilizantes o las semillas». Un panorama que se traduce en la destrucción de 652 explotaciones de vacuno en España durante el año 2021,  dos diarias.

Por lo demás, Donis defendió al sector primario como el «más sostenible» y señaló que «no hay nadie que cuide más la fauna salvaje que los ganaderos de la Montaña Palentina». Asimismo, alzó la voz contra quienes «criminalizan» una profesión que pidió «dignificar», al ser los agricultores y ganaderos los que mantienen vivos los pueblos, asientan población en el medio rural y hacen que el entorno «sea mucho más sostenible».

«Europa  diseña desde hace cinco años una PAC que ya nace muerta»

La nueva Política Agrícola Común (PAC) para el período 2023-2027 en la que está inmersa Bruselas en los últimos años no acaba de convencer al campo, ni a los profesionales del sector primario ni a las organizaciones agrarias que les representan.
Así lo puso de manifiesto ayer el presidente provincial de Asaja, Honorato Meneses, quien aseguró que «la Unión Europea lleva diseñando desde hace cinco años una PAC que va a nacer muerta». Una PAC para la que el Consejo Europeo adopta una política «más justa, más ecológica y más basada en los resultados».

A juicio de Honorato Meneses, las instituciones europeas deben «replantearse» sus políticas en materia de agricultora y ganadería. Y es que, según denunció, «el proyecto en el que se está trabajando desde la UE penaliza la producción y prima el medio ambiente y lo verde».

En este sentido, el líder de Asaja Palencia propuso un mayor «equilibrio» entre ambos factores para garantizar la continuidad y la supervivencia de un sector del que viven cientos de familias del medio rural.