Un gesto con antecedentes

Jorge Cancho
-

Muletazos

Un gesto con antecedentes - Foto: Óscar Navarro


El gesto de Manzanares de negarse a salir ayer a hombros de Campos Góticos por discrepancias con el palco no es nuevo en el mundo de los toro. Ya lo hizo el palentino Marcos de Celis el 12 de abril de 1959 cuando tras recibir dos orejas en Las Ventas tiró una de ellas al callejón por considerar excesivo aquel premio. Pese a todo, al de Villamoronta se le sigue reconociendo en libros y enciclopedias que aquel día abrió la puerta grande de Madrid. Con estos tipos de gestos se entiende a la perfección una expresión muy taurina como es la de vergüenza torera. 

 

Acceso con el tiempo junto
Fueron muchos los aficionados que en la primera corrida de abono de los sanantolines, y también en la segunda, acudieron a su cita en Campos Góticos con el tiempo justo para ocupar su localidad. Una situación que genera cierto malestar entre los más previsores y algún que otro tapón en las entradas de los tendidos, pese a la diligente labor de quienes controlan los accesos. Unos operarios que, además de evitar esas pequeñas concentraciones de público, dispensa hidrogel a todos y cuantos acuden a la plaza de toros e insiste en la obligatoriedad del uso de la mascarilla durante todo el ciclo taurino. Y es que, propiedad y empresarios insisten en hacer de la plaza un recinto seguro.

 

Bolas doradas del equipo de Manzanares en el apartado
El apartado tuvo en el mediodía de ayer en el patio de cuadrillas un componente añadido. Y es que el tradicional sorteo se realizó con unas bolas doradas que aportó el equipo del diestro José María Manzanares.