José María Nieto Vigil

Sin Perdón

José María Nieto Vigil


Desastre educativo

03/12/2021

Queridos lectores, antes de trasladarles mi reflexión, deben saber que mi opinión está fundamentada en mis más de treinta y dos años de experiencia docente. Creo, por tanto, que disfruto de criterio suficiente para efectuar las valoraciones que brevemente les traslado.
Una nueva perogrullada, en pleno curso académico, ha sido puesta en marcha por el ministerio de Educación y Formación Profesional, dirigido por María del Pilar Alegría Continente –qué infausta coincidencia de apellidos-. Digo bien, un auténtico esperpento que viene a vulgarizar aún más, si cabe, el maltratado sistema educativo español.
La excelencia, como objetivo fundamental, ha sido condenada al destierro y, en su lugar, triunfa el espíritu de la mediocridad galopante. La cultura del esfuerzo, el afán por aprender y el espíritu de trabajo han sido condenados al olvido. La única preocupación, desde la que se promueve tamaños desatinos, es única y exclusivamente reducir la estadística del fracaso escolar. Paradójicamente, el efecto será el contrario, el de un nuevo y atronador fracaso escolar. Así de claro y así de contundente lo manifiesto.
Los profesores se ven abrumados, desbordados y convertidos en el chivo expiatorio de tal iniciativa. Se convertirán, sin quererlo ni pretenderlo, en los autores materiales de la apostasía en detrimento de una educación de mayor calidad y mejor capacitación de nuestros alumnos.
Alucino en colores. No hay recuperaciones en convocatoria extraordinaria de septiembre, en la ESO los escolares podrán pasar de curso con áreas pendientes y, entre otras ideas iluminadas, los bachilleres podrán ir a la convocatoria de la selectividad con una asignatura suspensa. No me digan que no es para llorar.
Así pues, ¿De qué sirve trabajar y esforzarse para adquirir las competencias descritas en la Ley de Educación? De nada. La promoción automática está garantizada, aunque no se sepa hacer la o con un canuto. ¿Qué estimulo o motivación hay en el proceso de aprendizaje? Ninguno. Todos los alumnos, lo merezcan o no, estarán en el curso siguiente. 
¡¡¡VIVA LA FIESTA!!!