La planta de Renault en Villamuriel de Cerrato se verá obligada previsiblemente, de no variar la situación en lo que queda de semana, a parar los próximos 12 y 13 de septiembre por desabatecimiento de semiconductores, según las fuentes consultadas por DP. Todo ello, cuando el lunes se retomó el turno de tarde tras nueve meses de ausencia para aumentar la producción del nuevo modelo Austral.

El presidente de Renault España, José Vicente de los Mozos, ya advirtió a finales de 2021 de que la crisis de suministro de semiconductores proseguiría en 2022 y afirmó que desde la compañía están en contacto con los sindicato por si es necesario alargar las medidas de flexibilidad laboral. El alto ejecutivo vallisoletano indicó que se trata de un problema «global» que afecta a todos los sectores productivos, ya que existe una diferencia de un 15% entre la demanda y la capacidad instalada. 

En lo que toca de cerca, la factoría de Renault en Villamuriel se vio limitada varias meses por la escasez de chips a fabricar unos 700 vehículos diarios frente a los 1.200 habituales en dos turnos, cifra que incluso se superaba hasta que el turno de noche se suprimió en enero de 2021. El problema parte de la escasa capacidad de abastecimiento del principal proveedor de semiconductores de potencia automotriz, la planta que la marca alemana Bosch tiene localizada en el este de Europa. 

A  su vez, viene motivado por la escasez de materiales necesarios para fabricar los chips que proceden de países asiáticos. En el caso de la factoría palentina, el no contar con semiconductores afecta de lleno a distintas partes del vehículo, como las pantallas del cuadro de mandos electrónico, el sistema de bloqueo ABS o los aparatos de sonido, indicaron distintas fuentes, que precisaron que los problemas de escasez de chips ya se venían arrastrando con el inicio de la pandemia en 2020 y se acrecentaron en marzo de 2021.