El director de la Organización Internacional del Trabajo en España (OIT), Joaquín Nieto, aseguró ayer que la apuesta de recuperación económica y social de Europa con los fondos Next Generation son una «oportunidad única e irrepetible para el país y Castilla y León». En este sentido, dijo que la Comunidad tiene ventaja por «la amplia trayectoria del diálogo social», aspecto clave para abordar la recuperación y transformación, tanto en el aspecto laboral como en el digital y medioambiental.
No obstante, aclaró que también la autonomía tiene desventajas y retos ante el nuevo escenario postpandemia, como la transformación de diversos sectores arraigados en la región, ya sea el ámbito agrícola y ganadero o energético con la minería y las térmicas. «Y es que, los fondos europeos deben ejercer un impacto positivo y convertirse en una palanca de empleo, al poder superar los 800.000 empleos a nivel nacional», agregó.
Durante su participación en la jornada sobre El futuro del empleo y el trabajo decente, organizada por CCOO, Nieto subrayó igualmente que los proyectos de reforma, como el Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia del Gobierno, «tienen que hacerse realidad de la mano del Diálogo Social, dado que dicha negociación y acuerdo debe estar siempre en el epicentro», añadió.
El director de la OIT en España también alertó de que no todo van a ser buenas noticias, «por la falta de trabajadores cualificados en determinados sectores; de ahí la importancia de los convenios colectivos y el entendimiento y participación de todas las partes».
Un acuerdo verde. De igual modo, recordó que los fondos procedentes de la Unión Europea llevan consigo un acuerdo verde y una inversión orientada a la descarbonización de la economía y la transformación digital, «lo que supondrá que ciertos sectores desaparezcan, pero, a la contra, que emerjan otras más. Una paradoja en la que cobra importancia la transición justa», apostilló.
Por su parte, el secretario general de CCOO en Castilla y León, Vicente Andrés, afirmó que se está ante «un momento definitorio para España y el estado de bienestar», tanto por la inminente llegada de fondos europeos como por los aspectos claves a plasmar en el ámbito nacional, con la reforma laboral, los Presupuestos Generales o las pensiones.
En relación a la Comunidad, explicó que «España crece más rápido, lo que hace que la región pierda peso en la economía del país y vaya abandonando el tren del progreso». Así, pidió al Gobierno autonómico que sus acciones se basen en el diálogo y los acuerdos, «apostando por otra política financiera y fiscalidad», sentenció.