Jesús Mateo Pinilla

Para bien y para mal

Jesús Mateo Pinilla


Asesinos corresponsables

31/03/2022

En el 76, Noam Chomsky publicó dos ensayos políticos llamados La responsabilidad de los intelectuales, uno sobre la guerra del Vietnam otro sobre la muerte de Bin Laden. En él se preguntaba por la aceptación del compromiso social de los analistas intelectuales, la mayor parte de izquierdas. Ahora Carole Cadwalfadr, importantísima ensayista americana, dijo que no habíamos estado listos en ver el ataque de Rusia contra Occidente, llamándolo intromisión, injerencia, invasión informativa, o ciberguerra, cuando es una pura y dura masacre guerrera.
Todos los intelectuales coinciden en emitir respuestas que justifiquen los por ahora más de 5.000 ataúdes ucranianos.
Erich Hobsbawm, de lectura obligada por Sosa Wagner, en sus Revoluciones burguesas comenta que se deben mantener las fronteras contra los nacionalismos, los catalanes con España, los rutenos contra Ucrania, los galeses contra Inglaterra, ya que fueron el germen de la segunda guerra mundial. 
Alexander Duguin dice que una guerra es el estallido final del que manda en el mundo, solo justificada por el afán imperialista de la izquierda, la invasión ilumina una harapienta izquierda. El fascismo ruso no es marxista, dice Zizeck. 
Chomsky expresa su deseo de luchar contra el imperialismo americano. E Ilying solicita comprensión para la liberación de la humillación por el paternal monarca Putin. Humillación que, a fuerza de repetir, odian los barrios periféricos rusos. En la Teoría de Aleksievic los rusos humillados aplauden a Putin, se ríen de las víctimas y tornan a elogiar los más de 5.000 ataúdes a su llegada a Verania. Ese es el pueblo sufrido de Carrère, del que Gaston Ash aprovecha su sangre, sudor y lágrimas para edificar sobre ellos un cambio en la vieja Europa que verá renacer la nueva Verania.
Critican, pero comprenden, no les gusta el derribo del derecho internacional de Putin (Chomsky); pero justifican las actuaciones unilaterales del ruso asesino porque ya antes Clinton invocó el derecho al empleo de la unilateralidad.
Yo solo sé que así se justifica la barbarie. ¡Todos son asesinos corresponsables!