La Feria del Queso de Frómista sirvió ayer algunos de los mejores productos lácteos del país en forma de elaborados de vaca, cabra y oveja que tentaron los paladares de las cientos de personas que se acercaron hasta este mercado al aire libre que alcanzó su XXVII edición.

La actividad, pionera en la defensa del sector lácteo y ganadero para favorecer el desarrollo y riqueza de los núcleos rurales, reunió a 35 expositores -uno de ellos del propio Ayuntamiento, organizador de la feria- en los que se podía adquirir, además del alimento estrella que da nombre a este ya veterano evento, embutidos, todo tipo de condimentos y artesanía local. 

«Vecinos y veraneantes llevaban más de un mes interesándose por la celebración. Había muchas ganas por parte de todos, como demuestra la excelente asistencia de público y la buena marcha de las ventas», subrayó el alcalde, Fernando Díez. Unas palabras que refrendaron los propios feriantes, que destacaron la «buena caja» que hicieron durante la jornada.

Entre los que se estrenaban se encontraba Abel Ramos (Quesería Montequesos, Valladolid), quien se mostró «encantado» de su experiencia fromisteña. «La gente que acude a estos eventos viene buscando productos de calidad y aquí los encuentran», señaló.

La Feria del Queso y Productos Agroalimentario se vivió como una jornada de fiesta en la localidad, como demostró también la alta afluencia de visitantes llegados desde diferentes puntos de Palencia y otras provincias vecinas. Entre todos ellos se sorteó, vía online, al finalizar la jornada, un lote de productos donados por los propios vendedores.

Para garantizar su seguridad, el Consistorio estableció un concienzudo protocolo antiCovid que estableció un circuito unidireccional para evitar las aglomeraciones en el entorno de los puestos, además de las ya sabidas medidas como el uso de mascarilla e hidrogel y la distancia de seguridad. «Esto demuestra que se pueden hacer cosas si se cumplen las medidas establecidas por las autoridades sanitarias», destacó el primer edil.