El Equimercado Solidario que promueve en Guardo el colectivo Solidarios con el Tercer Mundo (STM) se ha convertido en un clásico de la Navidad. Una cita que los vecinos del Alto Carrión tienen marcada en rojo en el calendario, pues en ella tienen la oportunidad de adquirir productos que difícilmente se encuentran en los lineales de los supermercados y, de paso, ayudar a países en vías de desarrollo.

La presente edición fue muy especial, no solo por celebrarse en estas entrañables fechas, sino porque se recupera tras el obligado parón de la pandemia. Los tres años que han transcurrido desde la última cita, en diciembre de 2019, no han hecho más que ratificar lo que desde STM ya sabían: los guardenses siempre están ahí para echar una mano. Como muestra, hasta sus locales de la plaza de la Constitución se acercaron durante el fin de semana 200 personas, la inmensa mayoría ya habituales, pero también muchas caras nuevas.

De esta manera, el colectivo ha conseguido una recaudación próxima a los 500 euros a través de la venta de productos tanto de artesanía como de alimentación entre los que no podían faltar infusiones, café, chocolate, cacao, aperitivos, chocolatinas, chips de yuka y plátano, pendientes, collares, anillos, velas, cestos, libros, libretas, bolsas de tela e incluso belenes. Todo ello procedente del comercio justo.

«Estamos muy contentos con los resultados», reconoce Almudena Alonso, de STM, quien recuerda que el Equimercado es una actividad voluntaria que realizan «con mucho entusiasmo, tesón  y humildad» en la que dan a conocer «las necesidades de las comunidades del tercer mundo», a las que ayudan en su desarrollo y calidad de vida.

Los guardenses destacan, especialmente, la calidad de los productos que se ponen a la venta a través de las ONG Oxfam Intermón y Ekilikua, muchos de ellos exclusivos. De esta manera, quienes no hayan tenido tiempo de pasarse por los locales de STM durante el fin de semana tienen la oportunidad de colaborar con el colectivo todos los jueves de 18 a 19 horas.