Decía Miguel Delibes que en Castilla, el verano va de Virgen ( 16-7) a Virgen ( 15-8). Habrá que añadir que, en nuestra comunidad, la feria va del 15 de agosto al 15 de septiembre. Se comprueba fácilmente este dato leyendo en DP las páginas dedicadas a las fiestas patronales que se celebran diariamente en nuestra provincia. Y lo mismo ocurre en el resto de las provincias castellanoleonesas. Tradicionalmente estas fiestas se hacían coincidir con los trabajos agrarios-cosechas, vendimias, etc.-de las que la literatura popular nos ofrece numerosos ejemplos. En la segunda mitad de septiembre tiene lugar el comienzo de los cursos escolar y académico y, con ello, se cierra el paréntesis de las vacaciones veraniegas, lo que trae consigo el planteamiento de variadas situaciones tanto personales como políticas y económicas. Se habla de síndrome posvacacional sin que estemos muy convencidos de que debemos solicitar ayuda psicológica para  el regreso a la vida cotidiana, interrumpida durante siete o quince días. Este año parece, según los analistas políticos y económicos, que el comienzo del curso va a resultar especialmente difícil para las familias que tengan hijos en edad escolar. La subida de los precios que estamos padeciendo se va a notar dolorosamente en el gasto producido por los libros y el material escolar, la subida del precio del comedor escolar, la ropa y, cuando el frío llegue ( que llegará, aunque no lo parezca ) en la calefacción. Eso sí que va a producir graves síndromes que ningún tratamiento psicológico podrá atenuar. Por otra parte, la mayoría de las familias contratan actividades extraescolares o clases de refuerzo para aquellas materias que lo precisen. Estas actividades también subirán sus precios y, en muchos casos, serán necesarias cuando no coincida el horario laboral de los padres con el escolar, o bien, porque sean conscientes de que el aprendizaje en los centros escolares pierde calidad a causa de las nuevas y destructivas leyes educativas. Las familias que se lo puedan permitir buscarán para sus hijos los necesarios complementos a su formación que mejore sus perspectivas de futuro. Ya que nos esperan grandes dificultades para abordar el nuevo curso, aprovechemos que estamos en ferias para despedir, del mejor modo posible, el paréntesis que se cierra.