Mascarillas del Cristo del Otero y tecnología marca España

ALBERTO ABASCAL
-

La empresa MaskPalencia puede llegar a producir hasta 60.000 unidades FFP2 cada día · Están confeccionadas con polipropileno, uno de los materiales que avala la Organización Mundial de la Salud

MaskPalencia puede llegar a fabricar hasta 60.000 mascarillas FFP2 al día. La tecnología que utiliza es cien por cien marca España. - Foto: Óscar Navarro

Las empresas palentinas también saben amoldarse a los momentos de incertidumbre como el que sufre actualmente la sociedad, con el impacto del Sars-Cov-2. Es el caso de MaskPalencia, ubicada en la carretera de Santander, que después de varios meses de espera para obtener el certificado de producto, ya está en pleno proceso de expansión con sus mascarillas FFP2, realizadas bajo la marca España, con material tecnológico cien por cien nacional y, que además, tienen un toque eminentemente palentino, con la incorporación del logotipo del Cristo del Otero.

«Los controles para obtener el certificado y la correspondiente homologación son muy rigurosos y, por lo tanto, se tarda varios meses para conseguirlos», asegura en declaraciones a Diario Palentino Sara Rafael Guzón, responsable de la empresa.

Las singulares mascarillas están confeccionadas con material de origen nacional. «No contiene grafenos ni sustancias o elementos que puedan perjudicar a la salud y, además, procuramos darle un impulso a la imagen de Palencia en el exterior incorporando un símbolo tan nuestro como es el Cristo del Otero», pormenoriza Sara Rafael Guzón.

La empresa, por lo demás, dispone de unos 2.000 metros cuadrados de superficie y la capacidad de producción de las mascarillas puede alcanzar, en un pico máximo, hasta las 60.000 unidades diarias.

La máxima responsable del proyecto sostiene que el producto que elabora MaskPalencia se podrá adquirir bien por canales propios de venta o a través de la página web www.maskpalencia.com. Las mascarillas, además de incorporar la imagen de la obra de Victorio Macho, también pueden añadir otros logotipos o imágenes a gusto del consumidor.

«La mascarilla de protección, pese a la relajación con las restricciones en cuanto a su uso en el exterior, ha venido para quedarse», argumenta Sara Rafael Guzón, quien recuerda que no solo sirve para evitar los contagios de coronavirus, sino que los pacientes alérgicos «también se pueden beneficiar enormemente por sus características. No obstante, todavía existe mucha incertidumbre en cuanto al Covid y, por lo tanto, siempre es bueno mantener todo tipo de precauciones de carácter personal».

CARACTERÍSTICAS. La responsable de MaskPalencia sostiene que la mascarilla que produce, en blanco y negro, aunque no se descarta ampliar la gama de colores, «se ajusta perfectamente a la cara y permite tener un campo de visión más amplio que no ofrecen otros cubrebocas que están en el mercado y que muchas de ellos son de fuera. Las gomas de sujeción con los pabellones auditivos son suaves y no molestan para nada, algo que no es habitual», recalca Sara Rafael, quien recuerda que el diseño final se ha plasmado después de un buen número de pruebas en comparación con otros productos similares que se pueden adquirir. «De hecho, las mujeres no tienen con nuestro producto ningún problema con el tinte de los pintalabios como ocurre con otras protecciones», subraya.

Con una inversión aproximada de 450.000 euros, la sala de producción consta de dos máquinas de última tecnología y están supervisadas por tres y cuatro profesionales.

Las mascarillas están confeccionadas con polipropileno, uno de los materiales que están recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) por su eficacia. Llevan cinco capas de spunbond (tres) y megtblown (dos). Se trata de una combinación de tejido sin tejer de gran cobertura y que con bajo gramaje consigue gran resistencia longitudinal y transversal. Por eso y por su suave tacto está indicado para el sector médico e higiénico, aparte de los tratamientos especiales con los que poder diferenciar el SMS y SMMS (hidrófilo, antibacteriano, repelente al aceite, repelente al alcohol y la sangre). 

Las bobinas del material se incorporan a las máquinas confeccionadoras que mantienen un proceso de elaboración que se inicia con el pliegue nasal mediante el sellado por ultrasonidos y prosigue  con las plasmaciones de los logotipos con dos impresoras. Posteriormente, se añaden las gomas de poliester y finalmente se llega al plegado y cosido final, siempre mediante ultrasonidos.

La empresa palentina trabaja con mayoristas de Alemania y Francia

Las mascarillas, que se venden desde 0,22 céntimos por unidad, se pueden adquirir en paquetes (con diseño) de 10 o 25 unidades, aunque la empresa también ofrece la posibilidad de comprar cantidades al por mayor o granel.

Por de pronto, MaskPalencia se introducira en breve en comercios y farmacias, ademas de suministrar para firmas de distintos sectores de la provincia y de fuera, pero, como asegura Sara Rafael Guzón, la propuesta no se queda solo en Palencia. «Estamos trabajando ya con mayoristas de Francia y Alemania para poder encaminarnos a la exportación», reitera.