Salud Mental mejoró la empleabilidad de 100 personas en 2020

A. Benito
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Una de cada tres consiguió la inserción y en total se firmaron 42 contratos en un año marcado por los efectos de la pandemia

Salud Mental mejoró la empleabilidad de 100 personas en 2020

Un centenar de personas participó el año pasado en los programas de Itinerarios Personalizados de Inserción Sociolaboral para Personas y Jóvenes con Discapacidad de la asociación Salud Mental de Palencia, cuyas sedes se encuentran en la capital, Guardo, Aguilar de Campoo y Herrera de Pisuerga. Concretamente, se beneficiaron de esta iniciativa ocho jóvenes inscritos en Garantía Juvenil y otras 92 personas desempleadas. 


En un año marcado por los efectos de la pandemia 52 hombres, la mayoría con edades comprendidas entre los 31 y los 40 años, y 40 mujeres, principalmente las de la franja de 41 a 50 años, fueron atendidos en los programas de inserción sociolaboral para adultos. «En total, se formalizaron 39 contrataciones que beneficiaron a 24 personas, 12 hombres y 12 mujeres», expresa María González, técnica de Empleo en Salud Mental, que valora «muy positivamente» los datos, puesto que algunos beneficiarios obtuvieron más de una inserción y otros consiguieron renovar su contrato. Respecto a los jóvenes de Garantía Juvenil, cinco hombres y tres mujeres, el número de incorporaciones al mercado laboral fue de tres. «Dicho así podrían parecer pocos, pero la verdad es que es casi la mitad de los participantes», apunta González.


En conjunto, las cifras arrojan una inserción cercana al 30%, es decir, una de cada tres personas consiguió un empleo. «El porcentaje es menor al de otros años, pero hay que tener en cuenta la situación», matizan desde Salud Mental. La asociación fue pionera en la aplicación de itinerarios personalizados y a lo largo de los años ha ido profesionalizando un servicio que en Palencia se puso en marcha en el año 2012. «Adaptamos nuestro trabajo al usuario, por eso tratamos de dar respuesta a sus carencias a nivel formativo, pero también actuamos como intermediarios con las empresas», explica María González. 

Salud Mental mejoró la empleabilidad de 100 personas en 2020Salud Mental mejoró la empleabilidad de 100 personas en 2020


En cuanto al tipo de empleos que suelen encontrar las personas que participan en estos programas, el sector de la limpieza es uno de los más importantes, «y lo fue aún más el año pasado con el aumento de las medidas higiénicas», indica González, que también habla de un «exceso de encasillamiento» en estos puestos de trabajo. «Dentro de la asociación hay perfiles muy diversos, por eso también tenemos repartidores, empaquetadores, montadores, auxiliares de almacén, auxiliares de enfermería o ingenieros, entre otros», añade. 


En este sentido, María González insiste en la necesidad de que las personas con discapacidad estén presentes en todas las esferas de la sociedad y, por supuesto, también en el plano laboral. «Creemos en los centros especiales de empleo, pero también apostamos por la empresa ordinaria. Otra de nuestras funciones es la de dar visibilidad al colectivo», expresa la responsable del área de Empleo de Salud Mental en Palencia, que aunque crea que la concienciación es «cada vez mayor», advierte de la «variabilidad» dentro del tejido empresarial y de las diferencias que se producen en función de la discapacidad. «Es verdad que estamos avanzando, aunque no tan rápido como nos gustaría», manifiesta.


«La pandemia nos ha obligado a reinventar nuestro trabajo, pero también ha sido una oportunidad para detectar nuevas necesidades. Además, durante los meses más duros fuimos un apoyo para los usuarios», apunta González. Finalmente, esta agradece el apoyo de la administración y reconoce que la coordinación con otras entidades del sector es la clave del éxito de sus propuestas.


APOYO DE PARES. Marga López llegó a Salud Mental en el año 2013 desde el hospital de día de San Telmo. Tiene distimia, una alteración que se manifiesta en forma de depresión crónica y trastorno de personalidad. «Recibí apoyo desde el primer día, no me sentí incómoda en ningún momento. La verdad es que fue lo mejor que pude hacer», expresa esta usuaria de la asociación que en 2019 empezó a trabajar en ella como asistente personal. 


Antes estuvo en Hermanas Hospitalarias, pero tuvo que dejar el trabajo cuando enfermó su madre. «Cuando me dieron el diagnóstico en 2008 se me paró la vida, pero lo cierto es que gracias a mi enfermedad he conseguido un empleo que me llena», señala López. Y es que, su labor en Salud Mental consiste en acompañar y ayudar a otras personas con patologías similares a la suya. «Trato de ponerme en su situación y, sobre todo, siempre escucho. Eso es lo más importante, que los usuarios no se sientan juzgados, sino apoyados», continúa esta mujer cuyo trabajo es también parte de su terapia.


En ese sentido, López recomienda a las personas con problemas de salud mental que «no se lo piensen» y se dejen ayudar. «En esta sociedad no sobra nadie. De hecho, las personas con discapacidad somos muy válidas para muchas cosas», defiende al tiempo que reconoce un indudable avance en el conocimiento, aceptación y tratamiento de estas enfermedades. «Yo, por ejemplo, tengo a veces el deseo de irme, y para hacer frente a esos pensamientos me viene muy bien verbalizar lo que me pasa», señala López, que se ha convertido en la primera mujer con problemas de salud mental en trabajar para la asociación. «El hecho de que el estigma sea cada vez menor nos da visibilidad. También nosotros creemos en el empoderamiento y la resiliencia», concluye.