muchos palentinos les sonará el nombre de Juanjo Herranz por ser el autor de la carta del Palentino Ausente que apareció en la cuenta humorística de Instagram @palenciatomorrow el pasado día de SanAntolín. Lo hizo porque le entró morriña y relató su relación amor-odio con su ciudad de origen. Lo hizo mientras andaba porColombia, mientras trabajaba en un programa de la Unión Europea de cooperación internacional al desarrollo.
Ahora, Herranz ha vuelto a hacer las maletas y se ha dirigido a México para iniciar una nueva etapa en su vida. En este proyecto se lanza a recorrer el país norteamericano de punta a punta para llevar a cabo sus dos grandes pasiones: la escritura y los viajes. «La idea es estar seis meses y conseguir vivir como periodista freelance», explica. Aunque esté al otro lado del Atlántico, los palentinos podrán conocer de primera mano lo que está observando gracias a Diario Palentino, que publicará una sección especial cada dos domingos. La primera de las entregas, que llevarán el nombre de Palentino Ausente -180 días en México, será el 11 de diciembre y estará ilustrada por la también palentina Isabel Burón.
El itinerario arrancará en el sur, en Yucatán, en una de las zonas más turísticas del país de las rancheras. Posteriormente, tiene previsto pasar por lugares como Chiapas, Oaxaca,Guerrero,Ciudad de México, San Luis Potosí, Zacatecas, Chihuahua y Sonora. El punto final será, si todo marcha como tiene pensado, en Tijuana, urbe situada al norte, junto a los Estados Unidos. Herranz pretende mezclar el periodismo de viajes y la realidad social de la nación mexicana, conocer a las comunidades indígenas y hablar de algunas de las problemáticas de sus gentes. Entre los temas que ya ha pensado sobresalen la conocidísima Chichen Itzá, una de las siete maravilla del mundo moderno; el paso de Bansky por Chiapas; la otra cara del turismo enAcapulco; las librerías clandestinas de la capital; la lucha libre mexicana, la mina de Zacatecas o los desiertos de Sonora. Escogió este territorio porque ya lo conoce de un viaje que realizó por Iberoamérica antes del estallido de la pandemia de coronavirus, porque tiene contactos y amistades allí, porque «interesa mediáticamente en España» y porque el choque, al hablar el mismo idioma que en tierras palentinas, será menor que en otros destinos (como China o India). «La dificultad, incluso para comunicarme o tomar una cerveza, iba a ser mucho mayor y me iba a dificultar hacer entrevistas y conocer la realidad», manifiesta. El periodista intentará buscar un pequeño apartamento para permanecer en cada lugar unos 15 o 20 días y se desplazará en autobús. Lo ha planteado así para estar cómodo a la hora de trabajar, ya que sus crónicas también se leerán en otros medios y en la newsletter El viaje interminable -Juanjo Herranz.