Han pasado ya diez años desde que Diario Palentino adelantara en exclusiva que una multinacional asiática, Olam Internacional, con sede central en Singapur, había sido la adjudicataria de la unidad productiva de SEDA Solubles, que se encontraba en concurso de acreedores, por un montante de 38,1 millones de euros.

La adjudicataria resultó ser la oferta mejor valorada del estudio preliminar de las tres presentadas en tiempo y forma, entre ellas Prosol de Venta de Baños junto con un socio extranjero, por parte de la administración concursal, que en la mañana del 13 de noviembre de 2012 le comunicó la decisión al Juzgado de Primera Instancia Número 1 de Palencia, especializado en materia mercantil.

Conforme al acuerdo alcanzado, la adjudicataria debería hacer frente en los posteriores diez días a un pago del 10% del montante final de la adjudicación (el precio de salida propuesto por la administración concursal era de 32 millones de euros); es decir, 3.810.000 euros, que serviría para pagar los créditos contra la masa adquiridos por la cafetera palentina desde la presentación oficial ante el Juzgado del informe económico de evaluación de esta empresa, que llevaba entonces un año en concurso necesario de acreedores.

Diario Palentino pudo saber entonces que Olam Internacional no solo se comprometía a mantener la plantilla y el mercado en el que operaba la compañía, sino que además tenía previsto incentivar nuevos proyectos e inversiones.

«SEDA Solubles fabrica a buen nivel e incluso podría ampliar su producción ya que es viable y cuenta con personal cualificado y unas instalaciones adecuadas y modernas», llegaron a comentar a este periódico fuentes del comité intercentros tras anunciarse la terna de las firmas candidatas a hacerse con la unidad productiva de SEDA. Hay que recordar que el mercado mundial de café soluble estaba dominado por la multinacional suiza Nestlé, con una cuota del 50 por ciento, seguida de Kraft (10 por ciento) y SEDA y Sara Lee (5 por ciento) en 2011.

Pero han pasado diez años y la otrora SEDA Solubles ha seguido avanzando en su camino y, tras la reorganización de la multinacional, acaba de convertirse en SEDA and OFI (Olam Foods Ingredients) Company, un nuevo grupo operativo nacido de Olam. OFI  se creó a principios de 2020 tras el anuncio de la  reorganización dentro de Olam  International Limited (Olam) para desbloquear y maximizar su valor a largo plazo. «OFI ofrece productos e ingredientes alimentarios sostenibles, naturales y de valor agregado para que los consumidores puedan disfrutar de alimentos saludables y placenteros», explica a Diario Palentino Alberto Fuertes, responsable de Comunicación y Marketing y adjunto a la Dirección General. Consiste en negocios líderes en la industria de cacao, café, lácteos, frutos secos y especias y, para ello, ha construido una presencia única en la cadena de valor global que incluye sus propias operaciones agrícolas, originación en la puerta de la granja e instalaciones de fabricación. Según sus preceptos, OFI se asocia con los clientes, aprovechando su cartera complementaria y diferenciada de productos alimenticios a la moda, para crear soluciones que anticipen y satisfagan las preferencias cambiantes de los consumidores a medida que aumenta la demanda de alimentos más saludables que sean rastreables y sostenibles. Dispone de más de 110 plantas de producción repartidas por 49 países del mundo y da trabajo a 22.000 personas. Es el segundo productor independiente de café soluble en el mundo, el primer proveedor mundial de cacao en origen y el tercer proveedor de cacao a nivel mundial.

Pero volviendo a la base de SEDA, la empresa palentina es líder en el sector del café instantáneo de marca propia, gracias a su alto grado de especialización en la producción de café soluble y formatos de envasado adaptados. Tiene su fábrica de café soluble en Palencia (15.000 metros cuadrados de extensión) y un centro logístico y de envasado de última generación en la cercana Villamuriel de Cerrato (12.000 metros cuadrados), amén de las oficinas comerciales situadas en Madrid.

En cuanto a la plantilla, ha pasado de los 252 empleados en 2012 a los 308 de la actualidad, a los que hay que añadir los otros cien puestos de trabajo indirectos que genera. La producción también ha experimentado un importante incremento, ya que si hace 10 años producía 9.000 toneladas métricas, la cifra actual se sitúa en las 13.000 toneladas métricas, es decir, un 44,4% más, con una facturación de 120 millones de euros en el ejercicio contable de 2021 (es la quinta empresa más grande por facturación en la provincia).

Como dato curioso se puede afirmar que las 13.000 tm de producción se traducen en unos 6.500 millones de tazas de café al año, lo que equivale a proporcionar anualmente una taza de café a cada una de las personas que habitan en el mundo.

La cafetera palentina trabaja en los formatos spray, aglomerado y liofilizado y más del 80 por ciento de su producción es exportada a un mercado situado en más de 40 países del mundo, especialmente Europa, repartidos en cuatro continentes.

Otros datos a tener en cuenta de SEDA OFI es que en Palencia cuenta con una plantilla de cuatro nacionalidades y el 29 por ciento de la misma está formado por trabajadoras, lo que reafirma su apuesta por fomentar la igualdad. Asimismo, la empresa se encuentra en constante transformación y, para ello, apuesta de forma inequívoca por la formación. De hecho, a lo largo de este año ha invertido más de 5.000 horas formativas, preferentemente en materia de seguridad laboral y calidad. 

La apuesta por la economía circular también entra en el leitmotiv de SEDA OFI. «En Palencia quemamos los residuos de posos del café que se generan en el proceso productivo para generar el vapor que luego utilizamos como energía para elaborar el café soluble. En la planta de Villamuriel de Cerrato una buena parte de la energía que se consume es renovable», explica al respecto Alberto Fuertes.

«Cumplimos  con los más altos estándares innovando constantemente», ALBERTO FUERTES

responsable deComunicacióny Marketing y adjunto a la Dirección General

«SEDA cumple con los más altos estándares innovando constantemente. Contamos con un equipo con amplia experiencia en el proceso del café soluble y en toda la cadena de suministro. Creemos en el crecimiento responsable, haciendo negocios de manera sostenible para crear valor a largo plazo para todos», asegura a Diario Palentino Alberto Fuertes, responsable de Comunicación y Marketing y adjunto a la Dirección General.

Fuertes reconoce que en estos últimos diez años la compañía ha acometido inversiones, «y hemos renovado maquinaria, instalaciones y bienes de equipo para mejorar aún más el enorme potencial que tiene esta empresa».

Teniendo en cuenta que la provincia cuenta con una industria agroalimentaria de gran envergadura, el alma mater de SEDA OFI en Palencia ve muy positivo «fomentar sinergias comunes». «Hemos sabido crear en Palencia el Aula del Café pero hay espacio para incorporar oportunidades conjuntas en un sector (café, cereales, lácteos, étc) en el que predominamos y dominamos en esta provincia», apunta Alberto Fuertes.

Por lo demás, para que SEDA OFI tenga el gran calado que actualmente tiene en el mercado internacional, indudablemente necesita contar con certificados como el IFS alimentación o BRG, así como sellos sostenibles como UTZ, Rainforest Alliance café o Fairtrade. Y es que el objetivo es llegar a todo tipo de clientes y mercados, como el Kosher judío, cuyas leyes tienen su origen en la Biblia y están detalladas en el Talmud y en otros códigos de la tradición judía. Los alimentos Kosher son los alimentos que se preparan de acuerdo a normas dietéticas judías, las cuales son permisibles para el consumo, puesto que cumplen con los requisitos de la dieta de la Biblia Hebrea. 

Asimismo, desde Palencia la compañía cafetera también llega al mercado del Halal musulmán. Un producto Halal es aquel que cumple los dictámenes de la Sharia, excluyéndose alimentos, cosméticos, aditivos y procedimientos prohibidos, como son: Animales no sacrificados según el rito Halal. El cerdo, el jabalí y sus derivados. Tampoco perros, gatos, roedores, zorros, mulas, elefantes, monos o reptiles.