Cruz Roja atendió desde enero de 2020 hasta mayo de este año en un programa especializado en la provincia un total de 96 personas refugiadas, de las cuales 63 son adultas y 33 menores. La ONG, con motivo de la celebración del Día Internacional de este colectivo, apuntó que de las 19 nacionalidades distintas que han pasado a lo largo del año por los servicios sociales prestados, las que tienen mayor representación son Colombia, Venezuela y El Salvador.
La intervención de la organización humanitaria con personas solicitantes de protección internacional tiene como objetivo garantizar su protección e integración social en España. El programa consta de varias fases que cubren desde la primera acogida hasta la fase de preparación para la autonomía, con una duración de 18 a 24 meses.
Durante todo este tiempo, se lleva acabo una atención integral e individualizada que incluye, entre otros aspectos de apoyo a las personas, servicios de acogida temporal, asistencia legal y psicológica, aprendizaje del idioma y traducción e interpretación.
Desde la institución se ha comprobado el poder de la inclusión; cuando los refugiados reciben apoyo y se les brindan oportunidades. «Pueden contribuir significativamente a sus comunidades de acogida. Son personas con pasiones, habilidades, resiliencia y esperanza; no meros beneficiarios de la ayuda, lo que aporta mucho a sus vecinos y comunidades de acogida», explicaron.
voluntariado. Cruz Roja Palencia señaló además que la participación de personas voluntarias en la capital y provincia «resulta clave para la prestación de algunos servicios como el de aprendizaje del idioma, o para la realización de numerosas acciones de acompañamiento desarrolladas de forma transversal en las distintas fases y actuaciones del programa».
Igualmente, se destacó que muchas de estas personas refugiadas se han sumado al voluntariado de de la iniciativa Cruz Roja Responde para ayudar desde la primera línea de respuesta humanitaria ante la emergencia por Covid-19.
De esta forma, han podido colaborar con Cruz Roja en la atención a las personas más vulnerables que reciben apoyo en la capital y provincia en tareas como traducción e interpretación, acompañamiento social, enseñanza del idioma o la distribución de alimentos y medicamentos a quienes los han necesitado estos meses.