Sin goles en el debut en casa

David del Olmo
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Empate del Palencia Cristo Atlético (0-0) en su primer duelo como local de la temporada ante el Polvorín FC, filial del CD Lugo. Duelo de escaso protagonismo de los porteros

Sin goles en el debut en casa - Foto: Óscar Navarro

No pudo lograr su primera victoria del curso el Palencia Cristo Atlético, que no pasó del empate sin goles (todavía no ha marcado) en su estreno como local enLa Balastera ante el Polvorín FC, filial del CD Lugo y nuevo en la cuarta categoría del fútbol nacional.

El equipo palentino iniciaba su andadura como local ante un conjunto lucense que tampoco había ganado en el debut liguero (empató con el Avilés). Y eran los morados quienes trataron de llevar la iniciativa. Buscaban inaugurar su casillero goleador, aunque fue un encuentro de muy pocos remates, lo que se lamentaba desde la grada. Porque en la primera parte, siendo de los dos el equipo que más cerca estuvo de marcar, el Palencia Cristo solo probó una vez al portero visitante, Julen, al filo del descanso, en un acción aérea en el área pequeña que acabó en gol palentino, considerada por el colegiado del duelo como falta del delantero.

Hasta entonces, mucha labor en el centro del campo de unos y otros, pero poca profundidad. Los de Chuchi Jorques, eso sí, al menos dispararon. Ali lo intentó en carrera, pero el lanzamiento desde la frontal se le fue cerca del poste, al cuarto de hora. Y un par de saques de esquina, sin remates claros, al menos crearon inquietud en la defensa visitante.

Apretaba el equipo local al inicio del segundo periodo, con un cuarto de hora de alta intensidad y varias llegadas al área. Aunque a partir de ahí  el Polvorín empezó a encontrar un pasillo para sus ataques por la banda derecha. Y a punto estuvo de darle un buen susto al equipo palentino, con una veloz internada de Xabi Domínguez, que cayó en la línea de fondo ante Cobos ante el silencio de La Balastera (y del árbitro). El otro susto para la parroquia morada lo protagonizó Edu Mingotes con un intento de despeje que se envenenó y obligó a Guíller a estirarse con éxito. Lo intentaron hasta el final, pero faltó mordiente.