La dureza de la realidad económica con una alta inflación, precariedad laboral entre los más jóvenes y encarecimiento del precio del dinero ha llevado a que el 63% de los mayores de 55 años ayuda económicamente a su familia o entorno cercano, lo que supone un  20% más respecto a 2021, según el III Barómetro del Consumidor Senior, que revela que más de la mitad de la denominada como generación de plata (55%).

Son algunos de los datos de este informe elaborado por la Fundación Mapfre y Google sobre los hábitos de consumo de los 16 millones de senior españoles, que suponen más del 60% del gasto (25% del PIB) y entre los que hay más de cuatro millones en activo, de los que 3,6 millones trabajan, con más de 300.000 personas en puestos directivos y más de 100.000 emprendedores.

El análisis pone de manifiesto que ha aumentado su importancia como red de apoyo, principalmente en los grupos de edad de 61 a 70 años: el 67% de los que están entre los 66 y los 70 años reconoce que presta ayuda a familiares y amigos, mientras que el porcentaje es del 64% entre los de 61 y 65.

Además, la mitad de los más de 1.100 encuestados considera que tendrá que mantener el respaldo económico a allegados en los mismos niveles en el futuro, mientras que un 20% prevé que aumente y el 29% espera que sea menor.

Respecto al poder adquisitivo, ocho de cada 10 mayores de 55 años posee una vivienda en propiedad y menos de la mitad (43%) consigue ahorrar a final de mes -un 5% menos que en 2021-, según la encuesta de octubre, que destaca que tres de cada cuatro sienten que el precio actual de la energía es un riesgo para su estilo de vida y, más de la mitad, lo percibe respecto a alimentos y bebidas no alcohólicas. Un 46% declara que la partida a la que mayor gasto dedican es la de vivienda, agua, gas y otros suministros, seguida de alimentos y bebidas no alcohólicas.

En el 2023, la generación plateada pronostica un incremento del gasto en vivienda, combustibles y alimentación, así como una disminución en restauración, tecnología y artículos para el hogar.

Se intensifica la tendencia de los mayores de 55 a pensar que su situación económica empeorará, ya que este porcentaje asciende al 39%, frente al 32% de 2021.

El 61% manifiesta que suele pasar revisiones médicas y el 56% hace ejercicio físico; el mismo porcentaje que señala que evita el consumo excesivo de alcohol y tabaco y respeta las horas de sueño. Sin embargo, es poco común que presten atención a la salud emocional, la reflexión y la meditación (13%). En esta línea, el 23% realiza visitas como mínimo, mensualmente a un centro de salud, un 18% más que en 2021.

Tecnología e información

Más del 70% de los encuestados están conectados a internet; son unos 11 millones de personas (dos millones más que en 2020) y, principalmente, lo hacen con el móvil. El mayor porcentaje (43%) se conecta varias veces a la semana para informarse o leer la prensa, seguido de un 37% que lo hace para consultar operaciones bancarias y un 36% ve contenido online en las plataformas.

Por el contrario, solo un 4% reconoce que usa las redes de forma frecuente para comprar en línea, un 2% que lo hace para usar servicios digitales de salud y un 1% para meterse en apps para conocer gente.

En 2022, el hábito de viajar por ocio se ha mantenido en la generación silver, aunque ha experimentado un ligero descenso. Así más de un 70% explica que lo ha efectuado al menos una vez, frente al 71% de 2021. También baja la perspectiva de viajar en los próximos meses y, de hecho, se lo plantea un 72% frente al 84% que lo hacía un año atrás.

Solo el 15% de los senior desea alargar su vida laboral más allá de la edad de jubilación, y esto sucede mayormente entre los de más de 71 años y entre los que tienen un nivel de estudios superiores. Además, un 18% estaría dispuestos a rebajar su salario a cambio de reducir su carga de trabajo y un 8% emprendería un nuevo negocio. Sobre el lugar de residencia, el 30% desea mudarse a un entorno más rural y aislado.