La primavera no ha sido buena desde el punto de vista de la floración y eso conlleva más trabajo para los carrioneses, que tendrán que recurrir a otros materiales más allá de los pétalos de flores para realizar los dos kilómetros de alfombra con la que cubren el recorrido de la procesión del Corpus Christi, fiesta declarada de Interés Turístico Regional.

Serrín, posos de café y hierba son algunos de los elementos de los que los carrioneses han hecho acopio en las últimas semanas para poder decorar sus calles. Los motivos todavía no se pueden desvelar puesto que cada grupo de vecinos decide cómo elaborar la pieza de su tramo de calle. Voluntarios, miembros de la Fundación San Cebrián, la Guardia Civil y centenares de vecinos comenzarán a trabajar sobre las 6 de la madrugada en la elaboración de este gran mosaico. Después de marcar en el suelo el diseño, llegará el momento de rellenar los espacios.

Las previsiones apuntan a que los trabajos estarán finalizados sobre las 10,30 horas y quedarán a la vista de los cientos de vecinos y visitantes que no quieren perderse este espectáculo de color. Es necesario ser muy cuidadoso al recorrer el tramo del Camino de Santiago que atraviesa la ciudad  conocido como la Carrera del Corpus, puesto que es el que coincide con esta alfombra, para no desdibujar los diseños antes de tiempo. Será sobre las 12,45 horas, una vez finalizada la eucaristía en la iglesia de San Andrés, cuando comience la procesión que supone el final de esta peculiar alfombra.

Comitiva procesional. Los pasos de quienes forman parte de la procesión provocarán que los dibujos se emborronen. Abriendo el desfile irá un monaguillo con un incensario para purificar el camino, tras él una cruz de guía y, a continuación, una banda de música cuyos acordes marcarán el ritmo de la procesión. Los siguientes serán los representantes de las cofradías que portarán los estandartes y pendones que les identifican, que irán abriendo paso a los niños que este año han recibido la Primera Comunión. Ellos anteceden al Carro Triunfante sobre el que avanza una custodia de plata del siglo XVI que encierra la sagrada forma y cerrando esta comitiva las autoridades locales y provinciales.