El impacto económico que tendrá la medida aprobada el martes por el Consejo de Ministros y que entrará en vigor mañana -aplicándose una rebaja mínima de 0,20 euros en el precio del litro de combustible- podrá aliviar un tanto los bolsillos de los conductores en base a los precios actuales de 1,89 euros/litro en el gasoil y 1,86 euros/litro en la gasolina de 95. No obstante, teniendo en cuenta que en enero los precios eran de 1,41 y 1,53 euros, respectivamente, según el consumo de carburante de ese mes, aún aplicando la rebaja estatal, los usuarios de turismos y otro tipo de vehículos pagarían a mayores 2.262.800 euros.

Los últimos datos facilitados por la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores), ponen de manifiesto que durante el mes de enero en la capital y provincia se consumieron 7,60 millones de litros de diésel y otros 1,03 millones de gasolina de 95 octanos. El dinero recaudado ese mes en la provincia por los dos carburantes de mayor consumo fue de 12,3 millones de euros, mientras que con los nuevos precios de mañana, ya rebajados en 0,20 euros, el gasto medio aproximado ascendería en el acumulado de 30 días a 14,5 millones.

Si se mira el lado positivo -dado que el coste de los combustibles no ha dejado de incrementarse desde el inicio del año- con el precio medio actual de 1,89 euros/litro en diésel, y 1,86 en gasolina de 95, el gasto sería de 17,26 millones de euros mensuales para los bolsillos de los conductores, mientras que una vez aplicada la rebaja temporal de tres meses hasta el 30 de junio, la factura del gasto de carburante se reduciría en 5,16 millones  de euros en el conjunto de la provincia. 

El combustible, pese a rebajarse, sale más caro que en enero - Foto: Sara MuniosgurenDe este ahorro aproximado, 4,56 millones de ahorro corresponden al carburante de mayor consumo por parte de los palentinos, el diésel, y otros 600.000 euros a la gasolina de 95. Así, se aliviará en parte la factura final por llenar un depósito, siempre y cuando los efectos colaterales del conflicto bélico ruso-ucraniano no derive en más subidas del coste del barril de petróleo y, con ello, los precios de los carburantes sigan al alza como en los tres primeros meses del año de forma consecutiva, lastrando las ya maltrechas economías familiares.

La bonificación con un mínimo  de 20 céntimos el litro de combustible es para todos los ciudadanos, no  solo para los transportistas, y será  asumida en su mayoría por el Estado, que aplicará en su caso una rebaja de 15 céntimos de euro, mientras que las compañías petroleras harán lo propio con un mínimo de 5 céntimos de euro, aunque algunas ya han  anunciado descuentos superiores.

 Castilla y León, al igual que el resto de  España, encadena ya tres meses consecutivos de alza en el coste del litro de carburante, con repuntes del 25% en el caso del diésel o del 18% para la gasolina 95 en lo que va de 2022. Los porcentajes que se disparan hasta el 49 y el 37% si se compara con el precio de hace un año, cuando el litro rondaba los 1,20 euros del gasóleo y los 1,30 para la gasolina. 

El combustible, pese a rebajarse, sale más caro que en enero - Foto: Sara Muniosguren Con la rebaja de 0,20 euros por  litro a la hora de en el caso de los coches pequeños -40 litros de depósito-, el ahorro rondará los ocho euros por visita al surtidor; de unos 10 euros para aquellos vehículos con capacidad para 50  litros, y hasta los 12 euros para más de 60  litros de depósito.

JOSÉ ORTEGA. TAXISTA: 

«La rebaja supone poco, ya que la tarifa por servicio se fija para todo el año»

Un gremio muy castigado por la pandemia como el del taxi ve un tanto escasa la medida temporal del Gobierno de proceder a la rebaja de 0,20 euros el precio del litro de combustible, con el añadido en su sector de una ayuda directa de 300 euros por vehículo.

«Llevamos demasiado tiempo ya con una escalada de precios  y va servir de muy poco la aportación  estatal prevista. En nuestro caso, la tarifa por servicio prestado a lo largo de todo el año los estipula la Junta de Castilla y León y posteriormente la aprueba el Ayuntamiento», tal y como explicó a DP Jorge Ortega, en posesión de una licencia de taxi en la capital desde hace 8 años.

En su opinión, el coste de los carburantes en general va seguir oscilando con precios al alza y una subvención temporal apenas soluciona el coste que supone circular con el taxi en el día a día. «No poder incrementar el precio que percibimos  por nuestros servicios es un lastre y al final lo que te dan supone pan para hoy y hambre para mañana, porque si en poco tiempo el litro sube 20 céntimos más estaremos igual». El profesional del taxi entiende que hay otro tipo de medidas que podrían aplicarse y paliar la difícil situación económica que atraviesa su sector. «Está el gasóil profesional, que existe en otros ámbitos laborales como el de la agricultura, lo que podría suponer que exista un precio fijo para un plazo amplio de tiempo», explicó.

Los taxistas están viviendo tiempos duros desde que el covid-19 hizo su aparición. «Recaudamos un 30% por ciento menos al disminuir la demanda de servicios. Se habla mucho de otros sectores perjudicados, como es el caso de la hostelería, pero nosotros, como servicio esencial, hemos estado al pie del cañón todos los días y algunos con el vehículo casi parado. Ahora, en el caso de la huelga del transporte se puede intentar negociar las tarifas por cargar, pero en nuestro caso son fijas y reguladas todo el año», dijo.

MANUEL SUANCES. GASOLINERA: 

«La medida es un parche de 3 meses y el margen de beneficio será mínimo»

Manuel Suances lleva 31 años dedicado a la atención de una estación de servicio en el barrio de Allende el Río que lleva su apellido, cumpliendo la tradición familiar. Sobre el descuento de 15 céntimos  de euros del Gobierno por litro de combustible y los 5 céntimos que aportan las petroleras, señaló que «supone sosiego» por el alza de precios pero no servirá de mucho.

«La medida es un parche temporal de tres meses derivado de la huelga del transporte pero tampoco le va a suponer casi nada, porque hay otras cosas más que solucionar que el precio del gasóil. Se trata de algo puntual y es como poner un vaso de agua en el desierto. En mi opinión, no son medidas duraderas ni con un sentido práctico que beneficie al consumidor», concretó.

Al sector de las gasolineras,  según Manuel Suances, la aplicación de la rebaja del precio por litro de carburante le va a suponer un quebrando desde hoy. «Es una decisión de última hora y nadie nos ha comunicado cómo debemos actuar. Estoy aún dilucidando que el descuento no se debe aplicar con lo que figura en el poste de cada estación de servicio, si no en el ticket que el cliente obtenga tras repostar. Esto perjudicará la fluidez del trabajo al tener ir a la caja para recogerlo», señaló.

El descuento por litro de combustible, que aprobó el Consejo de Ministros el martes y no entrará en vigor hasta hoy, se ha notado en la reducción de usuarios para repostar. «Ahora mismo solo vienen los conductores a los que les queda poco combustible en el vehículo para andar y el resto quiere esperar para ahorrarse unos euros al llenar el depósito con la rebaja», apuntó.

Manuel Suances indicó que algunas pequeñas gasolineras tendrán problemas económicos. «No todas poseen capacidad de financiación suficiente al tener que adelantar cada mes los 15 céntimos que descuenten hasta que devuelva el Gobierno la cantidad. Las estaciones independientes debemos aplicar la rebaja de 5 céntimos y pensamos que los márgenes de beneficio que quedan son mínimos», concluyó.