La artista visual Ana Marcos dirige el proyecto Museo_IA. Aprendiendo del olvido, que utiliza inteligencia artificial para re-crear patrimonio artístico desaparecido. En este caso la actuación está vinculada al actual Museo de Palencia que, heredero de las desamortizaciones del siglo XIX, no cuenta -como otros Museos provinciales de su misma condición, origen y trayectoria- con fondos de carácter artístico -fundamentalmente obras de pintura y escultura-. En los documentos de trabajo de la Comisión Provincial de Monumentos y de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando se constata que en Palencia sí existió un lote relativamente numeroso de obras de arte, esencialmente pictóricas, preparadas para que con ellas se constituyera el primer museo provincial. Pero cuando fue finalmente creado, en 1921, el lote de obras de arte, formado por 57 pinturas, había desaparecido.
«Lo que proponemos es re-crear ese lote fundacional con tecnologías de inteligencia artificial y poder ofrecer al ciudadano del siglo XXI una lectura de lo que podría haber sido esa colección del siglo XIX que nunca llegó a formar parte de los fondos del Museo», explicó Ana Marcos, que ayer en la presentación del proyecto estuvo acompañada del ingeniero Alfonso Villanueva, el historiador del Arte Rafael Martínez y el director del Museo de Palencia, Francisco Javier Pérez.
«La información a partir del listado de las 57 obras, que contiene tres o cuatro datos de cada una -temática, estilo-, se traslada a un sistema de reconocimiento de inteligencia artificial y el algoritmo es capaz de interpretarla y buscar una traslación y encontrarla. De hecho tenemos cuadros que se parecen muchísimo a lo que podría ser una pintura de la época, otros bastante menos, porque está relacionado con la disponibilidad de información que hay en Internet. Cuantos más datos hay más aprende y más capacidades tiene de hacer algo más acorde a lo que consideramos pintaría un artista del siglo XVIII o XIX», explicó la directora del proyecto.
El 31 de marzo se entregará al Ministerio de Cultura, que subvenciona el proyecto, una versión que está en la web, y una de las partes importantes en su difusión es que, «para implicar a la ciudadanía, por votación popular anónima se elegirá entre tres opciones por cada una de las 57 obras la configuración de la colección», señaló Ana Marco, quien añadió que «todo el que entre en la web (www.aivirtualmuseum.com) podrá decidir para cada uno de los cuadros cuál es la opción que elige del aprendiz que tenemos en el computador».
Dentro del proyecto está contemplado también -con el apoyo de la Junta de Castilla y León- el montaje de una exposición en el Museo de Palencia, donde se mostrará el resultado de esa colección en la que «todos hemos participado» en diferentes instalaciones. «Una de ellas, que va a ser muy potente, con cajas de realidad virtual 3D. Se colocarán los cuadros en las localizaciones que supuestamente estaban para ser recogidos por la Comisión de Monumentos pero que luego no aparecieron», comentó Ana Marcos.
Como explica el director del Museo, solo se conserva un documento en el que aparecen relacionadas esas 57 obras. «Se depositaron primero en el monasterio de San Buenaventura, después se recolocaron junto al resto de la colección en el de San Francisco y cuando se desaloja este se trasladan las piezas a distintos almacenes y llegado el momento de inaugurar el museo en el palacio provincial, ya no están. Seguramente que se dispersaron por colecciones particulares, parroquias, monasterios y están sin localizar», manifestó Pérez, quien recordó que el anterior director del Museo de Palencia, Jorge Juan Fernández, localizó tres cuadros en el Museo Diocesano, otros dos posibles en los almacenes de este y tres más en la sacristía de San Francisco.