El último trimestre del año es siempre extenuante para las administraciones locales, ya que es el período durante el que se materializan los proyectos que se han seleccionado, aprobado y tramitado a lo largo de los ocho o nueve meses anteriores, a lo que hay que agregar es en esta época cuando los consistorios tienen que confeccionar las ordenanzas fiscales y el presupuesto del siguiente ejercicio.

Esta recta final del 2022 va a ser especialmente agitada en el Ayuntamiento de la capital, que tiene en su agenda una veintena de proyectos por valor de 17,4 millones de euros, entre los que se incluyen varios que los políticos gustan especificar como «de ciudad».

El grueso de esa inversión está vinculado al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea con fondos Next Generation, que sufragará desde la segunda fase del parque de Los Jardinillos, cuyo presupuesto asciende a 1.884.583,18 euros, a la elevación de la calzada en varios tramos de las calles de Higinio Aparicio, Eduardo Dato y Antonio Maura, la mejora de la accesibilidad en todas las paradas de autobús, la iluminación y reforma de 25 pasos peatonales o la conexión del camino de San Román con los caminos de sirga del Canal de Castilla y con la vía verde del tren burra.

Precisamente, la integración de la ribera del Carrión en la ciudad también dará pasos clave estos meses con proyectos como la senda peatonal y ciclista que conectará el parque de las Huertas del Obispo con el Camino de San Román y el Segundo Sotillo, el circuito biosaludable desde el puente Mayor hasta el parque de Marcelino Champagnat o el Itinerario peatonal accesible entre Puentecillas y el puente Mayor, todas por encima o muy cerca del millón de euros.

La primera fase del ambicioso proyecto del plan director para los cerros del Otero y San Juanillo, con un importe de 2.698.000 euros, o la mejora energética de la plaza de abastos, la rehabilitación del centro social de Miguel de Unamuno y la rehabilitación de la nave de la Estación de Pequeña Velocidad, que suman más de tres millones de euros, prometen un fin de año y un comienzo de 2023 frenético para el Consistorio de la capital.

La concentración de tal volumen de inversión en los próximos meses ha estado muy condicionada por causas ajenas a la planificación del Consistorio, que ha sufrido como otras muchas entidades locales los perjuicios del incremento de los precios de las materias primas, lo que ha deparado concursos públicos desiertos y modificaciones de presupuestos. 

Sin embargo, la incógnita es si la ciudadanía soportará el encadenamiento de grandes obras que se avecina estos meses, y que se prolongará, al menos, hasta las elecciones de mayo.