Incomunicado en plena cuarentena

A. Benito
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David Ruiz se realizó la PCR el lunes en el centro médico de Saldaña y al regresar a Congosto vio que carecía de cobertura telefónica. La avería afecta a varios pueblos de La Valdavia

Incomunicado en plena cuarentena

¿Se imaginan que en pleno siglo XXI los servicios médicos tuvieran que deslizar una nota por debajo de la puerta de su casa para comunicar el resultado de una PCR? Eso es exactamente lo que le ha ocurrido a David Ruiz, que el pasado lunes acudió al centro de salud de Saldaña para realizarse la prueba y al regresar a Congosto de Valdavia se dio cuenta de que estaba totalmente incomunicado. ¿El motivo? Una avería en la antena de la que depende su compañía móvil que, a día de ayer, aún no había sido resuelta y que mantiene sin servicio a cerca de una decena de pueblos de la comarca.


«La sensación de angustia ha sido horrible», aseguraba ayer Ruiz a Diario Palentino, que aunque desciende de Congosto, reside habitualmente en Salamanca. Lo hacía a través de un nuevo teléfono móvil con una tarjeta de otra compañía que ha tenido que comprarle la hermana de su pareja para poner remedio a su absoluto aislamiento. Al conocer la situación, su compañera, Judith Polvorosa, que se encuentra en la capital charra, llamó al centro de salud, y así fue como los médicos entendieron por qué el mensaje de «apagado o fuera de cobertura» saltaba en muchos de los teléfonos a los que habían llamado a lo largo de la jornada. 


«Es una auténtica vergüenza que con la situación que estamos viviendo ocurran estas cosas, máxime cuando es por teléfono como se comunican los resultados de las PCR», comentaba ayer indignado este vecino de La Valdavia que, además de dar positivo en test, se ha sentido totalmente abandonado. «Esto pasa porque en esta tierra somos unos resignados», añadía Ruiz, que está dispuesto a llevar a jucio a la compañía por los prejuicios que le han generado su «falta de voluntad» para resolver el problema.


Su indignación es la misma que la de su pareja, que solo ha recibido excusas de la empresa teléfonica, pero ninguna solución. «Nos dicen que no disponen del camión necesario para ir a arreglar la antena», indica Polvorosa, que no se puede explicar cómo una empresa de tal magnitud puede argumentar algo así. «Son tan miserables que han sido incapaces de alquilar las líneas de otras compañías hasta que se arregle el problema», critica Ruiz.


Este también segura que, a lo largo de estos días, nadie les ha cogido el teléfono en el cuartel de la Guardia Civil de Buenavista y que la respuesta del Ayuntamiento de Congosto ha sido «penosa». Al parecer, se han limitado a decirles que «no pueden hacer nada», algo con lo que los afectados no están de acuerdo. «Las entidades locales tienen más capacidad de hacer ruido que el ciudadano», afirma esta familia que, eso sí, destaca el «buen funcionamiento» del centro de salud de Saldaña.