Castilla y León, Galicia y Asturias vuelven a sacar las garras para defender oportunidades y un futuro para los territorios del noroeste. Elementos que pasan por impulsar el Corredor Atlántico que transcurre por las tres comunidades, y cuyo desarrollo acumula años de retraso. Una situación ante la que los tres presidentes autonómicos, Alfonso Fernández Mañueco, Alfonso Rueda y Adrián Barbón –los dos primeros del PP y el asturiano del PSOE– clamaron ayer en un foro celebrado en Santiago de Compostela, donde exigieron un impulso decidido del Gobierno de España a este corredor «por justicia». Fechas, actuaciones y fondos fueron las tres principales reclamaciones para el plan director del Corredor verbalizadas durante un acto donde los tres exhibieron unidad y lealtad. 

La cumbre autonómica echó el cierre con la firma de una declaración institucional que celebra como primer logro de la entente la designación del comisionado, anunciada ayer por el Gobierno, pero que exige la elaboración de un plan director para canalizar las inversiones necesarias para su desarrollo, que cifran en 7.884,3 millones, de los que casi tres mil irían a parar a la Comunidad. Los tres dirigentes regionales renovaron su alianza por el impulso del Corredor Atlántico con una declaración institucional que firmaron en la capital gallega al término de una jornada en la que se presentó una estrategia que será remitida al Gobierno de España para que elabore un plan director e impulse este eje logístico, aprovechando la llegada de los fondos europeos. 

Las tres autonomías solicitan, según recoge el texto, que el Gobierno de España elabore a partir del documento elaborado por las comunidades un Plan Director del Corredor Atlántico de mercancías ferroviarias que recoja de forma «detallada y calendarizada» las inversiones y actuaciones necesarias a partir del documento.

El noroeste también acordó compartir el trabajo realizado con el Gobierno de España y con los organismos competentes en la Unión Europea para seguir avanzando en una coordinación y planificación que permita alcanzar los objetivos planteados. En este sentido, se comprometieron a seguir trabajando conjuntamente para el desarrollo de estos objetivos teniendo como principal objetivo el interés general del noroeste peninsular a través de la colaboración «leal».

Los firmantes alegaron que el desarrollo del Corredor Atlántico servirá para mejorar la competitividad de sus empresas y para asentar población en el territorio. En concreto, consideran que las inversiones de 7.884,3 millones, que generarán 6.600 empleos directos e indirectos, triplicarán la cuota modal del ferrocarril en 2040, lo que permitirá mover hasta 20,4 millones de mercancías en 17 años, informa Ical. Esto, sostienen, evitará la emisión de 22 millones de toneladas de CO2 y permitirá ahorrar a las empresas 1.350 millones en diversos costes.

La principal obra es la solución al puerto del Manzanal, en León, que supone el paso natural entre El Bierzo y La Maragatería. Este punto es el que presenta las mayores dificultades por la elevada pendiente, así como por el trazado de la línea ferroviaria que para sortear las barreras montañosas.

Esta propuesta estratégica parte de un diagnóstico tras analizar 868,7 kilómetros de corredor. Hay trenes que están «lejos del estándar europeo» con «velocidades máximas en varios puntos con límites inferiores a los 100 km/h», señalaron los expertos durante la jornada de ayer, donde pusieron de manifiesto la presencia de «cuellos de botella» en electrificación y rampas características con pendientes muy elevadas, entre otras cuestiones. «Ante la falta de un plan director que nos marque los plazos no podemos valorar si estamos cumpliendo los hitos y todo nos parece indicar que estamos muy lejos».