El modista o modisto (ambas formas aparecen en el diccionario de laReal Academia Española para describir al hombre que se dedica a hacer prendas de vestir o a crear modas o modelos de ropa, principalmente para mujer) José MartínRevilla apuntaba maneras en el mundo de la moda desde que era un niño.

Explica que cuando paseaba con su madre por las calles de Palencia se fijaba en los escaparates para observar los vestidos que mostraban. En concreto, recuerda una tienda, Óscar Novias, que estaba ubicada en la plaza de León, un lugar que quedaba muy cerca de su vivienda. De aquella época comenta que la «moda masculina era muy aburrida»; de ahí que prestara más atención la femenina. Además, en el colegio pudieron confirmar esta pasión.Guarda todavía en la memoria que en un curso de preescolar, con la plastilina, hizo «algo parecido a un vestido».

Con estos antecedentes,  Martín admite que tuvo la «suerte» de que su profesora de diseño, la saldañesa Pilar Ríos, dejara Madrid y se trasladara a Palencia para abrir la academia en la que se matriculó. «Con ella fue con la que aprendí todo lo relacionado con la alta costura», admite el modista antes de destacar que su mentora también fue la persona que le ayudó en el primer trabajo serio que recibió, un traje para CarolinaBarcenilla, Miss Palencia en 1995. Durante los siguientes años también vistió a más participantes en el concurso de belleza, tanto de la provincia palentina como de la vallisoletana.

En 2003, y con una trayectoria previa que incluye un año en Barcelona, montó su primer taller en la calle Colón y en 2017 se trasladó al actual atelier, que está ubicado en la calle DonSancho. A lo largo de estos últimos cinco lustros se ha centrado en vestir a mujeres. Entre las últimas clientas conocidas figuran Estefanía Lyuk o Eva Marciel. No obstante, también ha diseñado trajes para hombres, un apartado que ha evolucionado positivamente desde que empezó a fijarse en los negocios palentinos.

Como era de esperar, también lo ha hecho el resto del mundo de la moda. Por poner un ejemplo, Martín cita los tejidos. Los de ahora son más ligeros y flexibles, aunque admite que la durabilidad, por lo general, es mejor que en el pasado.
Admite que desfilar en la Pasarela de la Moda de Castilla y León fue un reconocimiento a su labor, de la que destaca desfiles en la Ciudad Condal cuando era joven y en lugares como el Palacio Provincial, el Teatro Principal o San Pedro Cultural. También es el que vistió a los Reyes Magos en la cabalgata del pasado 5 de enero, una experiencia diferente a la que normalmente está acostumbrado. «Fue un reto», declara el modista, que tiene como referentes a profesionales de la talla de Balenciaga y Galiano para crear moda Made in Palencia en un taller el que trabajan cuatro modistas más.