La disolución de las Cortes y la convocatoria de elecciones en Castilla y León para el próximo 13 de febrero tiró abajo ayer el segundo puntal sobre el que se edificó el acuerdo que el 15 de junio de 2019 hizo posible que el Partido Popular y Ciudadanos obtuviesen el bastón de mando de la ciudad. La decisión tomada por el popular Alfonso Fernández Mañueco de expulsar a todos los consejeros de Ciudadanos del Gobierno supone en la práctica la desaparición de la red tejida en Génova y María de Molina sobre la que el Ayuntamiento lleva haciendo equilibrios desde el día que se acordó la investidura de Mario Simón como alcalde de la ciudad.

Un motivo más que suficiente para que todas las miradas se dirigiesen ayer al Ayuntamiento de la capital y, en concreto, a su alcalde, Mario Simón, también coordinador provincial de Ciudadanos, para preguntarle por el futuro del acuerdo PP y Cs y, por lo tanto, por la gobernabilidad de la ciudad. 

Simón, que lleva confinado desde el fin de semana tras dar positivo por coronavirus, manifestó a través de un vídeo y sin dar posibilidad a los periodistas de preguntar, que la situación es de «total tranquilidad» en lo que se refiere al Gobierno de la ciudad.

De hecho, defendió el programa, las líneas de actuación y las propuestas acordadas con el PP en el pacto de Gobierno «y que con trasparencia hemos informado a los palentinos y se van a seguir llevando adelante». 

«Nos pagan para trabajar y eso es lo que vamos a hacer», aseveró el primer edil. Tarea no les falta, ya que esta semana es clave para la confección del presupuesto de 2022, un documento que tiene que incorporar la solución al pago de 26,6 millones de euros por la calle Jardines a la Diputación.

«Es lo que he estado haciendo durante el día de hoy, trabajar con los concejales y técnicos, preparando los presupuestos, que son los más importantes para Palencia y dar una solución que demanda toda la sociedad a la calle Jardines, y en eso vamos a centrar nuestros esfuerzos», argumentó el regidor de la capital.

Partido Popular. Si por Ciudadanos no va a haber problemas en seguir adelante trabajando codo a codo con el PP, por parte de estos, tampoco. «Los tiempos y formas de gestión de la Junta de Castilla y León, nada tienen que ver con los de un Ayuntamiento como el de Palencia. Nosotros llegamos a un acuerdo de mínimos al inicio de mandato y nuestra postura es la misma desde ese día, independientemente de mociones de censura o adelantos electorales: llegar al final de los cuatro años cumpliendo el máximo de los puntos que nos comprometimos a ejecutar», aseveró ayer Alfonso Polanco. 

Para el portavoz del PP en el Ayuntamiento, «se ha logrado aunar, no sin un gran esfuerzo y altas dosis de paciencia y comprensión, un equipo de trabajo que funciona, que está haciendo razonablemente bien las cosas». 

«Por nuestra parte, no vamos a hacer otra cosa que no sea trabajar para seguir cumpliendo los objetivos marcados, los proyectos que la ciudad necesita y los planes que permitan que Palencia encare el futuro de la mejor forma posible, más allá de los responsables políticos que la institución tenga en el futuro», añadió Polanco.

Moción de censura. Sin grietas, al menos de forma aparente, en la alianza municipal de PP y Cs, la única opción de un cambio de gobierno en el Ayuntamiento pasaría por una moción de censura por parte del Partido Socialista y para la que se necesitan 13 de los 25 votos de los concejales de la Corporación y, por lo tanto, de Vox.

La portavoz de Vox, Sonia Lalanda, volvió a insistir en que esa posibilidad no es factible. «Estamos en el mismo sitio en el que estábamos», aseveraba la edil descartando impacto alguno en el Consistorio de la convocatoria de elecciones en la CyL. 

«Los del Partido Popular han demostrado que son unos impresentables y en el PSOE han saltado como hienas. Solo les importan los sillones, tanto en Palencia, como en Valladolid, como en Moncloa, y a eso Vox no juega», sentenció la concejala.

Petición de dimisión. El PSOE es consciente de que no es posible jugar la baza de la moción de censura, por lo que ayer, la portavoz de su grupo municipal, Miriam Andrés, no dudó en solicitar la dimisión de Mario Simón como alcalde. «Ni es el momento ni el lugar ni las circunstancias. No entiendo a qué viene esa petición», respondió Simón al PSOE. 

«Su situación es insostenible y la tesitura a la que aboca a la ciudad es totalmente desesperada y trágica. ¿Qué fuerza tiene hoy el alcalde apoyado por dos concejales para sacar adelante los presupuestos del año que viene?», preguntó Miriam Andrés.

Para el PSOE, «Mario Simón está sujetando una alcaldía para que determinadas personas del PP hagan su campaña de cara a las elecciones locales, ni más ni menos. Si eso no es lo suficientemente indigno, no sé qué tiene que pasar para que en esta ciudad nos pongamos a trabajar en serio por los intereses de los palentinos», añadió.

En esta situación, los socialistas tienen claro que el futuro pasa por ello. «El PSOE, como grupo mayoritario, se ofrece para dar un paso al frente, para que haya una alcaldía totalmente ajena a Cs y PP que pelee con fuerza por los intereses de los palentinos», reconoció la portavoz socialista. Sin embargo, eso nunca pasará. 

cuestión de confianza. La quinta fuerza del Consistorio, Ganemos, optó por otra posibilidad, la de que sea el propio Mario Simón el que plantee una cuestión de confianza vinculada a la aprobación del presupuesto. 

«Es una cuestión de honestidad», aseveró su portavoz, Sonia Ordóñez, quien considera que «ante la situación de bloqueo planteada respecto a un asunto de tanta trascendencia para la actividad municipal como es el presupuesto, se emplaza a la mayoría de la oposición a una doble disyuntiva, o bien a dar su confianza al alcalde, permitiéndole que prospere la aprobación del presupuesto, o bien a convertirse en nuevo gobierno municipal».

«Este alcalde ha hecho la peor gestión conocida en Palencia, y si fuera honesto debería irse si no es capaz de sacar adelante los presupuestos. El equipo de Gobierno y la ciudad están paralizados, Vox no colabora en nada después de haber votado a Ciudadanos en la investidura y no parece que vaya a haber acuerdo para el presupuesto», resumió la situación actual Ordóñez.

Guardo. La convocatoria de elecciones podría afectar a otro ayuntamiento de la provincia, el de Guardo, donde el Partido Popular gobierna gracias al apoyo de Ciudadanos. No obstante, sus protagonistas descartaban también que se vayan a producir cambios. «No va a afectar en nada, más allá, quizá, de alguna tirantez», aseveraba el alcalde de la villa norteña, Juan Jesús Blanco. 

El edil del PP, que alcanzó la alcaldía tras una moción de censura contra el PSOE respaldada por Cs, descarta también que el PSOE sume los votos suficientes para devolver la jugada. 

José Carlos Narganes, portavoz de Cs en Guardo, ratificaba que el pacto sigue adelante. «En el Ayuntamiento de Guardo no habrá ningún problema por mi parte. Aquí va a seguir todo igual. Eso lo garantizo», sostuvo.

Por su parte, la secretaria provincial del PSOE descartó también repercusión alguna en los ayuntamientos gobernados por Ciudadanos con el apoyo socialista o viceversa. «No hay ninguna repercusión porque funcionan muy bien, porque hay una relación muy buena y fluida y porque incluso algunos esos ediles de Cs han dejado de estar en ese círculo», sostuvo.