Cuando se presentaban los carteles de la feria, la mayoría de los aficionados calificaba de cartel estrella el de hoy. Máxime con el añadido de corrida goyesca y el recuerdo al añorado maestro Marcos de Celis, a lo que se unía una terna de lujo y el prestigio del ganado de Núñez del Cuvillo, aunque al obligar el pliego a ofrecer solo cuatro festejos en el abono la empresa decidía dejarlo fuera confiando en su gancho.

Morante de la Puebla, líder del escalafón, está tirando del carro este año destapando el tarro de las esencias en la mayoría de los cosos en los que actúa con independencia de la categoría de la plaza, aunque en Sevilla estuviese nada menos que cuatro tardes. Palencia aún no le ha disfrutado en su plenitud; hoy podría ser.

A Daniel Luque, ya le vieron ayer con la torista, atraviesa el mejor momento de su carrera y ya es un figurón tras lo demostrado en 2022. Y la ausencia tras su grave percance en Bilbao de Roca Rey, el que  más tira de las taquilla y que contribuía de forma especial a esa categoría extra del cartel, se ha resuelto de una forma extraordinaria al sustituirle un pedazo de torero, el riojano Diego Urdiales. Pese al cambio, debería mantenerse el esperado entradón con los alicientes de toreros, toros y Marcos.